Si hay una modalidad que se expande a pasos agigantados esa es el gravel. Muchos son los ciclistas que se han seducido por sus múltiples alicientes. Y es que el gravel es más que una mera modalidad de ciclismo, es un estilo de vida o una forma de entender la bicicleta.
Y lo mejor es que da cabida a muchos tipos de ciclistas con diferentes perfiles. Hay quienes lo conciben como una modalidad ciclo aventurera, utilizando la bicicleta para cargar sus alforjas y viajar hasta lugares recónditos con el placer de pedalear durante la travesía. Hay quienes prefieren explorar su vertiente más deportiva y otros la utilizan como una herramienta de ocio en sus rutas más relajadas.
La industria actual ofrece multitud de modelos para satisfacer todas estas necesidades, algunas marcas cuentan con más de una gama de gravel en su catálogo, debido a estas diferencias mencionadas entre un uso u otro.
Por tanto, hemos preparado un dossier con 10 bicicletas que ofrecen cualidades diferentes, unas potencian más la absorción sobre terreno roto, otras buscan la máxima velocidad en asfalto o grava y otras están preparadas para todo tipo de maltrato.
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Lo que comparten es un elemento en común: sus características propias hacen que el precio que la marca pide por ella resulte especialmente atractivo. Es importante tener en cuenta que no nos hemos limitado a una barrera de precio específica, sino que hemos escogido un montaje en concreto de cada modelo, de tal forma que podrás encontrar bicicletas con un amplio abanico de precios. ¿Estará aquí tu próxima bicicleta de gravel?
Con una colección muy completa con cuadros tanto de carbono como de aluminio, la GravelX fue una de las primeras bicicletas de gravel en llegar a nuestro país. De todos los montajes, seleccionamos el EVO 3.0, con un set de cuadro y horquilla de fibra de carbono monocasco. Su geometría se ha optimizado recientemente para potenciar la comodidad y estabilidad destacando su alta pipa de la dirección y un generoso paso de rueda que permite instalar cubiertas de hasta 42 mm.
La transmisión recurre a un desarrollo monoplato con cambio trasero Shimano GRX y cassette Shimano SLX de 11-42 dientes. De serie incluye cubiertas Hutchinson Touareg de 700x40 mm y todos los componentes periféricos están firmados por la propia BH con su línea específica para gravel. Está disponible en tres colores y para quienes prefieran un desarrollo más generoso, la marca alavesa propone la GravelX EVO 3.5 con el mismo montaje y configuración de doble plato, por 200 € más.
De nuevo un modelo que se ofrece en multitud de versiones, incluyendo cuadros de aluminio y carbono, en un amplio espectro de precios. Uno de los montajes más interesantes es esta Topstone Carbon Lefty 3, y es que conserva toda la exclusividad de los productos premium de Cannondale a un precio que no resulta desorbitado.
El cuadro recurre a la habitual fibra de carbono Ballistec de la marca, e incorpora un sistema de micro suspensión trasera denominado Kingpin, basado en unos pivotes LockR en los tirantes que, junto con la flexión del carbono proporcionan hasta 30 mm de recorrido.
No obstante, si nos hemos decantado por este modelo es porque en la delantera podremos disfrutar de las bondades de la nueva horquilla Lefty Oliver en su versión de aluminio, con diseño monobrazo y 30 mm de recorrido. La transmisión viene acompañada por un set Shimano GRX monoplato con elementos de las series 800, 600 y 400 (frenos).
Es de las pocas bicicletas de gravel que han optado por el montaje de ruedas de 650b, combinadas con cubiertas de gran balón de serie (47 mm), lo que refleja su carácter agresivo y predisposición a superar el terreno más roto y técnico posible.
Este modelo es una novedad absoluta, ya que incorpora de serie la nueva horquilla RockShox Rudy 30, presentada hace sólo unos días, lanzamiento del que nos hicimos eco aquí. Es una suspensión específica para gravel, con 30 mm de recorrido, muy ligera y con un paso de rueda de hasta 50 mm.
La Grizl es el último miembro en aterrizar al nutrido catálogo de Canyon en gravel, donde perfectamente podíamos haber incluido una Grail en este dossier. La Grizl CF SL, sin embargo, posee un ADN aventurero, su cuadro de carbono es muy resistente, propone una geometría cómoda y fácilmente controlable y además cuenta con una infinidad de puntos de anclaje para portabultos y portabidones.
Este montaje se completa con una transmisión Shimano GRX de la serie 800 íntegramente. Las ruedas DT Swiss G1800, con un ancho interno de 24 mm se complementan con una cubiertas Schwalbe G-One Bite de 45 mm.
Quienes prefieran disponer de este modelo sin la horquilla de suspensión, Canyon ofrece la Grizl CF SL 8 con horquilla rígida, rebajando su tarifa a 2.999 €. Un modelo que pudimos probar en este artículo.
https://www.youtube.com/watch?v=YcALPJ_yzG8&t=79s
La propuesta Revolt para gravel de Giant es de las más completas que existe, con modelos de carbono de grado advanced para usuarios de alto rendimiento y plataformas de aluminio de primer precio.
Podíamos haber escogido cualquiera porque todas gozan de un montaje muy acertado y un importe atractivo, pero nos hemos detenido en la Revolt 1, con cuadro de aluminio y un equipamiento incomparable en su rango de precio. La horquilla, además, es de fibra de carbono composite.
La geometría es corta y cómoda para facilitar reacciones ágiles. Cuenta con algunos componentes, como la tija y el manillar, diseñados para favorecer la absorción en terreno irregular. Transmisión y frenos recurren al grupo Shimano GRX de la serie RX400, con un desviador Shimano Tiagra.
De serie incorpora cubiertas de 38 mm firmadas por la propia Giant, aunque el cuadro permite instalar neumáticos de hasta 45 mm. Por precio y montaje, consideramos la Giant Revolt 1 una de las mejores bicicletas del mercado para iniciarse en el gravel sin la necesidad de realizar un desembolso mayúsculo.
La gama de gravel de Lapierre es muy acotada, consta de tan solo 3 modelos, aunque todos ellos con un precio atractivo y argumentos muy interesantes. Nos hemos quedado con el montae superior de la gama, la Crosshill 5.0, elaborada a partir de un cuadro de aluminio de geometría algo conservadora y preparado para todo tipo de aventuras.
Una vez más nos encontramos el grupo Shimano GRX en la transmisión, bajo la serie RX600, con ruedas Mavic de 21 mm de ancho de garganta y cubiertas WTB Riddler de 37 mm. Sin embargo, lo que hace más especial a la Crosshill 5.0 es la presencia de una tija telescópica de serie, siendo la única de este dossier que lo incluye a pesar de ser un componente en auge en esta modalidad. Está firmada por la propia Lapierre, con un ancho de 27,2 mm y 80 mm de recorrido.
La firma asiática se ha especializado en disciplinas ‘hermanas’ como el gravel y el ciclocross. La gama Silex se ha renovado recientemente y queda demostrado en sus excelentes acabados. Aunque nos ha costado escoger un solo montaje, nos quedamos con la Silex+ 6000, ya que propone elementos diferentes a la competencia sobre un magnífico y absorbente cuadro de fibra de carbono CF2.
La gama Silex convencional propone ruedas de 700c como un concepto muy polivalente, pero la versión Silex+ que ves aquí cambia a ruedas de 650b, con cubiertas muy anchas de 45 mm. El objetivo, obviamente, es un mayor rendimiento en terreno exigente.
El grupo Force1 de SRAM es el encargado de comandar la transmisión y los frenos, con un desarrollo monoplato de 38 dientes y un cassette de 11-42 dientes. El peso se queda por debajo de 9 kilos (8,8 kg) y su llamativo color turquesa la convierte en un objeto de deseo.
Dos modelos componen la gama X-Tour de MMR específica para gravel, y cualquiera de los dos podría hacer temblar al resto de bicis de este dossier por su relación equipamiento-precio. Nos quedamos con la entrada de la gama, la X-Tour 10, con un cuadro de fibra de carbono monocasco de diseño con aroma clásico.
Toda la transmisión recurre a la serie RX800 del grupo Shimano GRX (excepto las bielas) con un desarrollo monoplato. El resto de componentes también rayan a gran altura, con la elección de gamas diseñadas para la disciplina del gravel. Tal es el caso de las ruedas DT Swiss G 1800 o las cubiertas Hutchinson Touareg de 700x40c.
Una bicicleta estelar a un precio terrenal con la que disfrutar de esta disciplina al máximo a la antigua usanza puesto que no dispone de sistemas de absorción específicos.
Exclusividad en cada poro. La gama Addict Gravel se ha renovado recientemente con una plataforma tan efectiva como espectacular. Estrena un nuevo cuadro de diseño aerodinámico que integra todos los elementos de forma inteligente.
La Addict Gravel 20 ha nacido para convertirse en una súper ventas y es muy argumentos no le faltan. El cuadro de carbono HMF acepta cubiertas de hasta 45 mm y viene acompañado por el nuevo grupo de transmisión SRAM Rival eTap AXS. Es la última incorporación del gigante norteamericano al gravel y se trata de un grupo electrónico e inalámbrico. Con un único plato de 42 dientes y un cassette de 10-44 dientes, su capacidad de adaptación es asombrosa.
Las ruedas Syncros RP2.0 de 24 mm de ancho se visten con cubiertas Schwalbe G-One de 45 mm, mientras que el resto de componentes periféricos también traen el sello Syncros adaptados a esta disciplina. Un conjunto muy eficaz y tecnológico, que además presume de un acabado elegante y vanguardista (extraordinario trabajo de pintura) y un peso global muy ligero (8,8 kg).
Una de las bicicletas de gravel con más tradición del mercado, fue renovada la pasada temporada para actualizarse a las exigencias de la modalidad actual. A pesar de que el fuerte de Specialized no sean sus precios bomba, este montaje sí presenta una selección de componentes muy equilibrada sin renunciar a la mejor tecnología de la casa.
Está montada sobre un cuadro de fibra de carbono Fact 9R, con la compuerta de almacenamiento SWAT en el interior del tubo diagonal. Además, es el modelo más económico que cuenta con la tecnología de suspensión Future Shock 2.0 integrada en la dirección con 20 mm de recorrido. Recuerda que este sistema fue renovado hace un par de temporadas, con la inclusión de un cartucho hidráulico y la posibilidad de ajustar la compresión.
La transmisión recurre al grupo Shimano GRX con la serie RX800 al completo y cuenta con componentes aptos para el gravel como la tija Roval Terra de fibra de carbono.
Las ruedas DT Swiss G540 se nutren de unos discretos neumáticos de 38 mm, aunque permite le montaje de hasta 47 mm y ruedas de 650b.
El magnífico trabajo de pintura Gloss Ice Blue/Clay/Cast Umber/Chrome/Wild Ferns hace de esta Diverge Comp Carbon una bicicleta única, aunque quienes prefieran un toque más discreto está también disponible en negro mate.
La Trek Émonda SL 6 es el montaje de mayores ventas en el segmento de la carretera y la firma de Wisconsin ha pretendido replicarlo en la versión de gravel, la Checkpoint.
Se erige sobre un cuadro de carbono OCLV 500 y cuenta con la tecnología IsoSpeed, una rótula que desarticula el tubo vertical permitiendo una ligera flexión vertical del tubo del sillín sin comprometer su peso ni su rigidez.
Recurre al grupo Shimano GRX con la serie RX800 y un desarrollo de doble plato con cassette Shimano Ultegra de 11-34 dientes, una polivalencia total. Podíamos haber escogido el montaje inferior, la Checkpoint SL 5, con un precio 500 € inferior, pero la SL 6 cuenta con un set de ruedas Bontrager Paradigm Comp de 25 mm de ancho, que sin duda se adapta mejor a las cubiertas de 40 mm que incluye de serie.
Una bicicleta de gravel muy completa y tecnológica, con un peso declarado de 9,1 kg en talla 56.