¿Cómo va?
El modelo Surge de Fitbit es una solución cómoda y práctica para los que busquen un monitor o reloj de entrenamiento para montar en bici, pero también para otras actividades, como caminar, correr o, simplemente, cuantificar la cantidad de actividad diaria. Es sumamente práctico que cuente con una pantalla táctil o que la medición de la frecuencia cardíaca se realice directamente en la muñeca prescindiendo de la tradicional banda al pecho. La señal de GPS mediante la que determina velocidad, distancia o altitud es sumamente precisa y fiable, sin pérdidas de información. Los históricos que ofrece son claros y útiles para conocer lo que estás haciendo y tener un feedback de tu actividad. La medición del pulso segundo a segundo ofrece la misma precisión que los mejores dispositivos específicos del mercado. Existen tres tallas de pulsera, pensando también en el mercado de las chicas. La retroiluminación de la pantalla es muy práctica en condiciones de poca luz.
¿Qué falta?
Valoración: ***
Texto: Edu Fernández
Fitbit es una de las peores compras que podéis hacer y os explico por qué:
El problema que tiene (Éste y otros modelos) es que la correa no es intercambiable. Es decir, si la correa se te rompe, tendrás un módulo de monitor que no te servirá de nada ya que, al estar el sensor de pulsaciones en el módulo y no poder llevarlo en la muñeca, no podremos monitorear nuestra actividad.
Lo que es la correa tiene una vida útil de un año (Como mucho) aproximadamente, pasado este tiempo, tendréis un bonito y pequeño pisapapeles.
Las correas de Fitbit son pobres, muy pobres en cuanto a calidad se refiere por lo que el sudor, el calor, el agua y demás condiciones externas harán que la correa se degrade a una velocidad espantosa.
Antes de comprar una Fitbit, por este rango de precios, mejor mirad la Samsung Gear Fit 2. Mismas características, relación calidad/precio muy similar pero con la ventaja de que sí se le puede cambiar la correa, lo que significa que, cuando se os rompa (Que se os romperá), por 5€ (en Amazon) podréis comprar otra y volver a poder utilizar el módulo de monitorización.
Como experiencia personal, las correas de Fitbit me han durado en torno a los 4 meses, más o menos igual que las del Samsung Gear Fit 2. La diferencia es que ahora tengo tres módulos de Fitbit inutilizables (La empresa me cambió el reloj por estar en garantía) mientras que la Samsung la puedo utilizar gracias a que le puedo cambiar las correas.
Espero que os haya servido de ayuda 🙂
¿Y esto es todo tras 100kms? Lo siento pero falta mucha información. He probado dispositivos para blogs de tecnología y y como apasionado del btt creo que hay público suficiente para una buena sección de pruebas de gadgets. Pero requiere profundizar más. Un saludo.