Orbea y Canyon han acordado la concesión de una licencia parcial de la tecnología Inside Line patentada por Orbea.
La patente Inside Line de Orbea, lanzada por primera vez en la Orbea Oiz en 2018, introduce mejoras en el cableado interno del bloqueo del amortiguador trasero, mejora la estética, crea una línea más directa entre el amortiguador y el mando del bloqueo e incrementa la integración del amortiguador en el cuadro sin entorpecer el acceso al resto de controles.
Las patentes de Orbea en Europa (EP3587234) y Estados Unidos (US11077913) protegen el diseño de Inside Line y sus características innovadoras. Tras conversaciones cercanas y cooperativas entre ambas compañías, han acordado que Orbea otorgará una licencia parcial a Canyon sobre dichas patentes. La licencia permitirá a Canyon acceder a determinados aspectos de las características de diseño del I-Line: mejora la estética al tiempo que reduce la fricción, protege el cableado de la suciedad y libera espacio en el triángulo delantero.
Además, Orbea ha anunciado que donará los beneficios derivados de este acuerdo de licencia a proyectos de construcción y mantenimiento de senderos. La firma con sede en Mallabia asegura que esto les permitirá seguir ampliando su apoyo al conocido Trail Building.
¿Qué es Inside Line?
La integración de los componentes y el cableado buscando una estética más limpia y elegante es uno de los pilares sobre los que se sustenta el diseño de las grandes bicicletas de la actualidad. En Orbea fueron conscientes de ello muy pronto y en 2016 comenzaron a trabajar en la integración del cableado del amortiguador en el interior del cuadro.
El proyecto se llamó Inside Line y pudimos verlo por primera vez en la Orbea Oiz de 2018, una de las bicicletas de Cross Country más exitosas del mundo, avalada también por sus triunfos en competición. Aunque hoy en día, a las puertas de 2022 ocultar el cable del amortiguador es algo extendido, en aquel momento Orbea fue la primera marca que se propuso lograrlo y la Oiz una bicicleta pionera en obtenerlo. Actualmente no existe un diseño que iguale al Inside Line en lo que a integración del cableo del amortiguador se refiere.
Para llevarlo a cabo, Orbea trabajó de forma conjunta con Fox para modificar en exclusiva el diseño de sus amortiguadores con el fin de desplazar el bloqueo al lado opuesto del cuerpo del amortiguador y conseguir así el camino más directo posible del cable desde el mando de bloqueo hasta el amortiguador, pasando por el interior del cuadro. Rápidamente este bloqueo ganó popularidad por su tacto suave, diseño atractivo y por quedar totalmente protegido frente al polvo y otros agentes externos.
Inside Line es, por tanto, una tecnología completa, donde se consigue aunar beneficios estéticos, mecánicos y funcionales para el ciclista. De hecho, la integración de parte de la suspensión en el tubo superior concede mayor espacio para el bidón, lo que facilita su extracción y anclaje durante la marcha.
Como curiosidad, Orbea necesitó tres años de un largo y laborioso proceso hasta la obtención de la patente de Inside Line y, gracias a ello, han podido llegar al acuerdo de cesión parcial con Canyon que se ha hecho público hoy.
