El flamante fichaje estrella del BH Templo Cafés UCC abrió la temporada de competición 2021 en Cross Country el pasado fin de semana en la Copa Catalana de Banyoles, y lo hizo escogiendo la rígida que tiene a su disposición. Veamos en detalle cómo es la BH Ultimate de David Valero, sus especificaciones propias y en qué difiere a los montajes de serie.
El biker de Baza, cuatro veces Campeón de España, afronta una temporada clave en su carrera, tal y como nos afirmó en esta entrevista exclusiva. Por ello salió a por todas en el trazado catalán, pugnando por el triunfo hasta el final a pesar de conformarse con un meritorio tercer puesto en un pódium de nivel Copa del Mundo. En este artículo analizamos todo lo que sucedió en este pistoletazo de salida de la temporada.
Como decíamos, Valero escogió la BH Ultimate en lugar de la Lynx Race por la que optaron sus compañeros de equipo. El granadino es un consumado especialista en XC y para esta prueba prefirió la ligereza y agilidad de la ‘hardtail’ de la firma alavesa.
Sin embargo, no se trata de una Ultimate EVO convencional, sino que está plagada de detalles que hacen de esta bicicleta un auténtico bólido de competición. Los componentes más ligeros y deportivos sirven a un equipo, y a un corredor, que optan al triunfo cada vez que ajustan un dorsal al frente. Así es la BH Ultimate de David Valero.
Cuadro
Aquí sí encontramos el mismo modelo disponible para el público final. Se trata del exclusivo marco Ultimate Carbon 29, elaborado a partir de fibras de carbono de alto módulo Toray T1100G y con un peso de tan solo 840 gramos en talla M. Con casi 1,90 de estatura, Valero utiliza un cuadro de talla XL.
Horquilla
Sin sorpresas. La última versión de la horquilla tope de gama de Fox para Cross Country, o lo que es lo mismo, una Fox 32 Step Cast Factory. Ofrece 100 mm de recorrido, cuenta con el propio bloqueo remoto de Fox y su peso es de 1.443 gramos.
Transmisión y frenos
Después de tantos años asociado a SRAM, el cambio de equipo también implica un cambio en el fabricante de la transmisión, optando en este caso por el grupo XTR 9100 de Shimano. El cassette también responde a este grupo, con el desarrollo máximo de 10-51 dientes, mientras que el juego de bielas está firmado por Rotor, con sus exclusivas Kapic de carbono y 175 mm de longitud.
Si te estás preguntando por el tamaño del plato, se trata de un exigente Rotor Round de nada menos que 38 dientes, no apto para cualquier aficionado.
Los frenos son también unos XTR de Shimano, con las manetas de carbono. Los discos, no obstante, los montan la firma española Galfer, con su modelo ‘flotante’ Wave DB002W de 160 mm en cada rueda. Galfer también aporta las pastillas, con compuesto rojo apto para todo tipo de condiciones y especialmente tratados para lidiar con el barro.
Ruedas
Nada parecido a lo que puedas encontrar de serie. El BH Templo Cafés monta un set de llantas Duke Racing Wheels, en concreto las Lucky Jack SLS2. Son específicas para XC de competición y combinan dos anchuras internas diferentes, de 28 mm en la ruedas delantera y 25,6 mm en la trasera, con un peso bomba de 330 y 307 gramos respectivamente.
Esta firma de corte artesanal comienza a hacerse un importante hueco entre los montajes de ultra competición y, además de usarlas el equipo español, sus ruedas sirven también a bikers de la talla de Pauline Ferrand-Prévot, Julien Absalon o Mathias Flückiger.
En cuanto a los neumáticos, el equipo cuenta con Chaoyang como sponsor y como tal proporciona las nuevas cubiertas Phantom Speed, con un tpi de 120. Son las más ligeras y deportivas de la firma asiática, con un discreto balón de 2.2 pulgadas y un taqueado reducido en la banda central y más pronunciado en los laterales.
Periféricos
Sorprendentemente, en los componentes periféricos sí hay muchos elementos que podemos encontrar en una BH Ultimate de serie (de alta gama, claro). El cockpit está firmado por EVO, la marca de componentes de BH, con un manillar plano EVO Carbon de 720 mm y una potencia EVO SL de 60 mm.
La tija también recurre a esta firma, una BH EVO Carbon de 27,2 mm de diámetro con la que el propio Valero bromea por su llamativa altura. Se completa con un cierre BikeYoke Ultralight, cada gramo cuenta.
Encima, el punto de contacto es un sillín Prologó Scratch M5 CPC Nack PAS, por supuesto con cuerpo y raíles de fibra de carbono y rematado con refuerzos antideslizantes. La versión más ligera de este sillín, que es todo un alarde de tecnología, declara un peso de tan solo 146 gramos.
Completa este montaje ‘premium’ un juego de pedales Shimano XTR, de 310 gramos de peso.