La Ghost Road Rage de Javier Bañón es la única bicicleta de gravel de la Skoda Titan Desert 2022 y no hemos querido perdernos su ‘bike check’. Ha sido customizada para adaptarse a esta carrera y la analizamos en profundidad.
Quién sabe si estamos ante un pionero que abre camino a una tendencia a punto de explotar. En la Skoda Titan Desert encontramos bicicletas de todo tipo, materiales, recorridos de suspensiones o componentes curiosos, pero si hay una bici única ésa es la Ghost Road Rage customizada de Javier Bañón. ¿Por qué? Las imágenes hablan por sí mismas, es la única bicicleta de gravel en carrera.
Javier Bañón es un reputado creador de contenido y especialista en gravel y bikepacking. Con una dilatada experiencia en aventuras de todo tipo con este tipo de bicis, en esta ocasión ha querido ir un paso más allá participando en una carrera de Mountain Bike por etapas con una bicicleta de gravel.
Es cierto que en esta carrea del desierto hemos visto adaptaciones de bicicletas de montaña con componentes procedentes del gravel. Pero esta es la primera vez que se participa con una bici 100% gravel, aunque ha sido muy modificada para soportar la exigencia de esta competición.
Veamos en detalle cómo es la gravel Ghost Road Rage Essential de Javier Bañón.
Cuadro
Es el marco Road Rage Essential de serie y prácticamente el único elemento de la bicicleta que no ha sido modificado. El cuadro está elaborado en aluminio pero la horquilla es de carbono. Incorpora multitud de orificios para el montaje de portabidones, alforjas, guardabarros y todo tipo de portabultos.
Hemos tomado las instantáneas con la bicicleta preparada para la etapa maratón, lo que ha permitido a Javier aprovecharse de toda la capacidad de carga del cuadro para repartir todo el peso extra que hay que portar sobre la bici en lugar de a su espalda.
Transmisión
La personalización en el grupo de cambio es pequeña. Los platos responden a un juego Shimano GRX de 46 y 30 dientes mientras que el cassette sí se ha cambiado, optando por un modelo de 11 coronas en lugar del modelo de 10 piñones del montaje de serie. El dentado va de 11 a 42 dientes y esto ha obligado a Javier a 'hilar muy fino' con el ajuste del cambio trasero y las manetas.
Ruedas
Aquí, en cambio, encontramos una adaptación total a la exigencia que requiere el recorrido de la Titan Desert. Los aros, de 27,7 pulgadas, son unos Dr Wheel FRW con pared de carbono, buscando aligerar el conjunto y acomodar mejor las cubiertas gracias a su generosa garganta de 27 mm.
Los neumáticos Chaoyang Zippering, por su parte, presentan un balón muy abultado para una disciplina como el gravel, de 2.0 pulgadas (50 mm), con un compuesto reforzado. A pesar de no llevar un protector interno, Javier nos ha confesado que ha aplicado más cantidad de líquido tubeless de lo habitual (120 ml).
Cockpit
El manillar persigue mejorar el confort ante las largas jornadas de pedaleo en el desierto. Se trata de un manillar RaceShift con una elevación (rise) de 20 mm. Además, Javier ha acoplado unos puños ergonómicos en el bar end muy útiles.
La potencia es uno de los componentes más llamativos de esta Ghost Road Rage de gravel. Es una Vecnum Freequence que integra un sistema que ofrece 30 mm de absorción, 20 de ellos hacia abajo y 10 en suspensión hacia arriba.
Tija y sillín
Al igual que en la parte frontal, en la tija encontramos un sistema de filtración a partir de un elastómero por paralelogramos. Es de la firma Raceshift y es muy útil en terreno ondulado y roto tan característico en la carrera por etapas del desierto.
El sillín es una elección curiosa. Se trata de un Specialized Mimic, un modelo diseñado teóricamente para la fisionomía femenina pero que se ajusta muy bien a la biomecánica de Javier y además resulta particularmente cómodo.