Recién llegadas a nuestro mercado, las Drift tienen argumentos para representar una alternativa a las marcas de referencia.
11-camaras-com_WEB.jpg">Con un diseño particular y compacto con pantalla integrada, mando remoto y lente giratoria. Así se presenta a primera vista una de los últimos modelos en aparecer en nuestro mercado. Se trata de Drift. Una cámara con niveles de resolución estándar en los modelos de calidad actuales, eso es 1,080p, y algunas particularidades que la diferencian con claridad de su competencia. Lo que más nos llamó la atención es la incorporación de la pantalla en el propio cuerpo de la cámara, un gadget que en otros modelos tiene que adquirirse por separado o bien, como el caso de la AEE, sólo está incluido en las versiones tope de gama.
Por una cantidad de dinero más que razonable, Drift ofrece una cámara realmente capaz. Probablemente, su punto débil esté en su sensor de luz. Las transiciones de luminosidad que hace la cámara ante diferentes condiciones de luz son bruscas. Por otro lado, los colores son vivos, aparentemente más que en otros modelos, lo que hace que en zonas sombrías la Drift muestre una imagen algo más oscura.
El gran angular, de 170°, queda restringido a una resolución de 720p, con lo que aquí la imagen pierde algo de calidad respecto a la GoPro o la AEE. Para filmar a una resolución máxima de 1.080p, el ángulo de visión queda limitado a 127°; de todos modos, aún con este ángulo obtenemos un buen encuadre y una visión periférica suficiente, salvo que filmemos en lugares realmente abiertos y con muchos más ciclistas a nuestro alrededor.
La cantidad de accesorios de serie es suficiente para que puedas filmar casi desde cualquier parte de tu bici, aunque echamos en falta, por ejemplo, el soporte para montar en el manillar. Un soporte, junto a otros accesorios, que puede comprarse por separado, y además con el atractivo de que, generalmente, los accesorios de Drift son algo más económicos que los de la competencia.
El menú para moverse en las configuraciones es intuitivo, y gracias a la pantalla es de fácil visualización y compresión. Las acciones de iniciar o finalizar un vídeo emiten sonidos diferentes para que puedas diferenciarlos, aunque echamos de menos un mayor volumen para sentirlos en días de viento o con ruido ambiental. Por el precio que tiene, sus prestaciones y calidad son más que interesantes.
Precio: 269 euros