Ciclocomputadores: guía práctica para elegir tu modelo ideal

Ciclocomputadores: guía práctica para elegir tu modelo ideal

Este año no hemos parado de hacernos eco de nuevos lanzamientos de ciclocomputadores. Cada vez son más sofisticados y completos para intentar hacerte más fácil tu salida en bici. Pero no siempre el más completo o compacto es el mejor. Te ayudamos a elegir el ciclocomputador adecuado en función de tus necesidades, nivel y presupuesto con esta guía práctica.

El ciclocomputador se ha convertido en un accesorio imprescindible para la inmensa mayoría de ciclistas, sean o no profesionales. Navegación, control de la distancia y el tiempo, registro de entrenamientos o incluso alertas de seguridad o tráfico. Todas estas funciones se incluyen en estos dispositivos adaptados para el manillar.

Un auténtico ordenador de a bordo que, si te tomas un poco serio lo de montar en bici, se hace imprescindible para mejorar tu experiencia ciclista. Pero la gran cantidad de modelos que ofrece el mercado actual, hace que elegir el adecuado o dar con la mejor opción calidad/precio sea complicado. Con esta sencilla pero práctica guía pretendemos repasar conceptos, características y recomendarte el mejor modelo a tus necesidades como ciclista, con una serie de recomendaciones concretas de las marcas más fiables.

Ciclocomputadores, ¿qué modelo comprar?

Podemos dividir la oferta actual de ciclocomputadores en función de su precio y funciones principales, o comunes a todos ellos:

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La gama más asequible, con funciones básicas con cuentakilómetros, marcador de velocidad, distancia recorrida, tiempo y recuento de calorías consumidas en algunos modelos. Perfectos para comenzar a salir en bici, realizar rutas cortas y no muy alejadas del punto de salida, mantenimiento sencillo y tamaño compacto.

Su autonomía es larga (de más de un año en algunos casos) gracias a su alimentación por pila de botón. Hay opciones Wireless sin cables (algo más caras) y con cable. Etc. Ejemplos: gama Sigma Wire u Originals, iGPSPORT iGS10S, Cateye Velo Wireless o Padrone o Magene C206.

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Un rango de precios más amplio y donde podemos encontrar ya opciones con pantalla a todo color y en alta resolución. Navegadores GPS (algunos de ellos bastante avanzados y útiles) y funciones avanzadas de registro de entrenamiento, aparejadas a medidores de frecuencia cardiaca, velocidad, cadencia o medición de vatios.

Perfecto para quienes ya tienen varios meses o años de experiencia con la bici, salen frecuentemente, o se atreven a explorar nuevas rutas más inaccesibles.

La variedad es mayor en este nivel de precios, así como la especialización (más enfocados en la navegación, otros en el entrenamiento, etc). Os recomendamos modelos recientemente renovados como el Sigma Rox 4.0 o Rox 11.1 Evo con su pack más simple, o más consolidados (y completos) como el Garmin Edge 130 Plus.

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En este tercer y último nivel hay una gran disparidad de precios. Pero por algo más de 200 € ya puedes hacer con un ciclocomputador lleno de funciones avanzadas de registro de entrenamiento, control del mismo, navegación de precisión sobre mapas o alertas de seguridad.

La mayor inversión merecerá la pena si compites a lo largo de la temporada, o participas en eventos y marchas con cierta dureza, que requieren de una preparación física adaptada y planificada. Asimismo, su conectividad y compatibilidad con medidores de datos (cadencia, frecuencia cardiaca, vatios) es mayor y más precisa que los de gama media, provocando muchos menos fallos.

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El gran salto de calidad en ciclocomputadores viene con modelos como los famosos Garmin Edge 530, Explore o el nuevo 1040 con carga solar, Stages Dash 200 o los Bryton Rider 800S y 500S. Echa un vistazo también a la gama de navegadores GPS de TwoNav, más enfocados en la exploración de rutas fuera del asfalto), o marcas asociadas a ciclistas profesionales como Wahoo, Hammerhead o la propia Garmin, de gran fiabilidad y precisión.

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La gran proliferación de app móviles gratuitas que suplen las funciones tradicionales de los ciclocomputadores, han hecho que los smartphones se posicionen como alternativa económica a los de gama de entrada y medía. Con un soporte de móvil pegado a la parte trasera de éste (destacamos aquí los de SP Connect, compatibles con varios soportes de móvil para manillar) es posible desde navegar en rutas off-road hasta registrar cadencia, velocidad o vatios.

También la nueva generación de relojes inteligentes o deportivos pueden suplir buena parte de las funciones de los ciclocomputadores, aunque con menos memoria y una pantalla de datos mucho más reducida. No obstante, con él se libera el manillar de soportes y dispositivos, liberándolos de su peso.

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Por último, te damos una serie de recomendaciones a la hora de lanzarte a comprar tu próximo ciclocomputador:

  • Tamaño, ¿en qué medida fijarse?: por lo general, se ha adoptado el tamaño de la pantalla en pulgadas como medida de referencia para los ciclocomputadores. Aquí no te dejes llevar por modas o porque la pantalla más grande sea siempre la mejor. Es posible que quieras sólo ver los datos más básicos en grande para evitar distracciones o saturación de datos. Por lo que una con 1,5 o 2” puede ser más que suficiente.
  • Fáciles de usar: un ciclocomputador útil y solvente tiene que ser intuitivo y de fácil manejo, que evite distracciones y permita concentrarse en la conducción. Busca modelos con navegación sencilla para los menús, con letras y números de gran tamaño y buena resolución de pantalla. La función de retroiluminación, para ambientes de luz bajos u oscuros, puede ser muy práctica. La pantalla táctil también mejora el manejo, a pesar de la subida de precio.
  • Mira el nivel de impermeabilidad: una característica que muchos podéis pasar por alto, pero es muy importante para conocer el grado de resistencia del dispositivo con agua o condiciones meteorológicas adversa y así evitar averías. Actualmente, la escala de referencia es la IPX, acompañada de un número del 1 al 8. El 1 es la protección más básica (lluvia ligera durante 10 minutos), mientras que la 8 soporta la inmersión completa y continuada durante 30 minutos.
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  • Wireless y conectividad: no pases por alto este apartado. La conexión sin cables ANT+ o Bluetooth es un salto de calidad para el ciclocomputador, que permite el trasvase de datos del dispositivo a móviles u ordenadores portátiles para un análisis de datos más detallado y de mejor visualización. Además, la conectividad con el móvil y medidores permite aumentar el número de funciones y servicios del dispositivos, sin coste añadido.
  • Autonomía: por último, y no menos importante, fíjate bien en los datos de autonomía del dispositivo. Pero no sólo en él. Características como el tipo de batería, su capacidad, la resolución de la pantalla, el número de funciones o menús o las características de la pantalla influyen en el mayor o menos ahorro de la batería. Por lo general, la autonomía de un ciclocomputador de gama media actual, con batería recargable, está entre las 15 y 20 horas, en condiciones de uso normal.
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