8 maneras de mejorar tu bici sin gastar mucho dinero

8 maneras de mejorar tu bici sin gastar mucho dinero

¿Quieres mejorar tu bici para rendir más y no sabes por dónde comenzar o no quieres gastar mucho dinero? Existen determinados componentes de la bicicleta que puedes sustituir sin hacer un gran desembolso y obtener así una mejora del comportamiento de la bici. Te ayudamos a identificarlos y mejorarlos.

Seguro que ha llegado el momento en que tu bicicleta comienza a quedarse anticuada o en desventaja con respecto a las más modernas de tus compañeros de grupeta. O has decidido tomarte esto del ciclismo en serio, quieres entrenar duro, o competir en alguna prueba, y tu bicicleta puede no darte la eficacia que deseas.

Lo más rápido es comenzar a mirar nuevos modelos de bici. Pero no es la época perfecta para ello por razones que todos conocemos. Por lo que otra opción es mejorar tu bici actual conteniendo el gasto. Si optas por esta última vía, hay una serie de componentes clave no muy costosos, que deberás actualizar. Y también operaciones de mantenimiento sencillas y económicas.

No es una serie o lista cerrada y tú elegirás qué te conviene cambiar como prioridad, dependiendo del uso o comportamiento que quieras obtener en tu bicicleta mejorada.

Mejorar tu bici por partes (sin gastar mucho dinero)

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Puedes empezar a mejorar tu bici por uno de sus componentes clave. Tener unos buenos frenos es sinónimo de maniobrabilidad y control. Obtendrás un dominio total de las trazadas, la gestión de curvas o el paso por obstáculos. Al final esto implica mayor confianza y la posibilidad de arriesgar en determinados tramos, sin miedo a percances o caídas.

¿Cómo tener unos frenos mejores sin gastar mucho dinero? Si cuentas con discos, no hace falta que cambies todo el sistema. Simplemente con sustituir una de estas tres piezas, o todas, notarás ya una gran mejoría.

Si eres de frenar con mucha frecuencia es posible que te convenga hacerte con unas metálicas o cerámicas. Son dos tipos que garantizan un menor desgaste y eficacia tanto en seco como en mojado. En cambio, si usas el freno lo justo, pero cuando recurres a él quieres la máxima eficacia, unas orgánicas de calidad cumplirán perfectamente su cometido. El desembolso en ambos casos, incluso si se opta por modelos de alta calidad, no suele superar los 50 euros por los dos pares para ambos frenos.

Coste: 25 € por freno

Una pieza a la que no se le presta demasiada atención son los cables del freno. Si tienes frenos de disco mecánicos o de zapata en tu bici de carretera, realiza una sustitución periódica, anual o semestral. Opta por adquirir un tipo de cable resistente y de baja fricción, como los de acero inoxidable con recubrimiento de teflón y funda de kevlar. El gasto de cambiar cables cada año o seis meses es bajo, pero tiene muchos beneficios.

Un juego de dos cables de acero inoxidable de marcas como Shimano o SRAM cuesta alrededor de 10 euros. Puedes echar un vistazo también a las opciones de Jagwire, con cables y fundas de alto rendimiento de coste ligeramente superior, pero muy eficaces.

Coste: 10 €.

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Cambiar el disco de freno por otro de mayor diámetro o diseñado para soportar mejor el sobrecalentamiento será la tercera opción económica de mejora de frenos. Sólo con sustituir un disco delantero de 160 mm por otro de 180 mm de tu MTB aumentarás la capacidad de frenado.

Coste: 15-25 € (modelos de gama media).

Adapta tu manillar

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El manillar es uno de los tres puntos de contacto del ciclista con la bicicleta. De ahí la importancia de tener uno adaptado para potenciar tus puntos fuertes en cuanto al manejo de la bici. Si practicas MTB y te gusta ir rápido y bien acoplado a la bici, puedes comprar e instalar un manillar nuevo de 700 o 710 mm o incluso cortar por los extremos el que ya tienes si es demasiado largo. En cambio, si lo que quieres es más control y seguridad, puedes adquirir uno 20 o 40 mm más ancho y de dos alturas (forma de U en el centro).

Comprar un nuevo manillar con estas medidas supone un gasto de entre 25 y 40 euros si es de aluminio. El precio aumenta el doble si es uno de carbono. Aunque el ahorro de peso es importante (100-150 g) y lo acabarás notando en marcha.

Coste: 25 - 40 € (modelos de aluminio).

Si haces ciclismo de carretera, una mejora de la bici sencilla y económica es cambiar la cinta. Por aproximadamente 20 euros puedes tener una nueva y puedes elegir varios tipos, dependiendo de su quieres mayor confort para tus manos o un tacto directo, aunque más incómodo. Para el primer caso existen las cintas gruesas, o con gel incorporado, y para los segundos las finas o clásicas.

Coste: 20 €. 

Cambia la potencia

No abandonamos el cockpit de la bicicleta. La potencia es un componente muy importante para optimizar la postura y potenciar tu rendimiento. Al igual que en el manillar, puedes cambiarla por una más larga para adoptar una postura más acoplada, buscando incrementar la velocidad. Pero si lo que quieres es obtener una postura más erguida y cómoda, o que potencie el control, habrá que elegirla más corta.

También fíjate en la inclinación de la misma. Una potencia con inclinación hacia arriba (ángulo positivo), aumenta el control y manejo de la bicicleta. Mientras que hacia abajo irás más acoplado, pero a cambio el control empeorará en los tramos más técnicos.

Coste: 25 - 50 €.

Opta por un sillín cómodo

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En el sillín, segundo punto de contacto con la bicicleta, podemos mejorar también la bici. Eligir un sillín confortable, que te permita acabar la ruta sin molestias musculares, en espalda o glúteos, debe ser tu prioridad. Esto repercutirá positivamente en tu rendimiento, mejorará la recuperación muscular e incluso evitará la aparición de lesiones.

El coste de adquirir un sillín, pasado de gama baja a media o de media a alta, no es excesivo, aunque para tener un producto de calidad, de buen acolchado y diseño ergonómico, habrá que moverse en la horquilla entre 50 y 100 €.

Coste: 50 - 100 €.

Tija antivibraciones

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Más que sustituir una tija de aluminio por una de carbono para ahorrar unos gramos, sería más útil cambiarla por una con retroceso o diseño 'flex', capaz de filtrar las vibraciones del terreno. El ahorro de peso en la tija no es tan perceptible en la práctica como contar con estas propiedades flexoras o absorbentes. Puedes encontrar tijas 'flex' en rangos de precio de entre 80 y 120 €.

Recuerda elegir el diámetro correcto y compatible con el cuadro, antes de proceder a cambiarla.

Coste: 80 - 120 €.

Cambio de plato

En determinados grupos de transmisión monoplato, ya sea para MTB, gravel o carretera (donde cada vez tienen mayor presencia) es posible cambiar fácilmente el plato a uno mayor, sin realizar un gran desembolso. Sustituyendo un plato de 30 dientes por uno de 34, por ejemplo, adaptarás tu desarrollo a terreno más llano o rodador y optimizarás tu cadencia de pedaleo, velocidad y rendimiento. No obstante, deberás mostrarte más fuerte en las subidas.

El cambio de plato no suele ser muy costoso (de 20 a 50 euros en grupos de gama media) ni la sustitución complicada. Sólo tendrás que tener en cuenta la compatibilidad con el grupo de transmisión, así como la coincidencia del BCD o diámetro entre los tornillos de anclaje a la biela.

Coste: 20 - 50 € (grupos de gama media).

Invierte en cubiertas

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Las ruedas son uno de los elementos que más ayudan a mejorar de manera global la bici. La más eficaz es el cambio de llantas. Pero éstas son costosas y no entran en el objeto de esta guía, por lo que habrá que centrarse en las cubiertas.

Para mejorar tu bicicleta te recomendamos invertir, de forma prioritaria, en neumáticos. Pero elige tus nuevas gomas en función del uso, estilo de conducción y del terreno habitual por donde ruedes. En general, si quieres ligereza y velocidad opta por ajustar la anchura y elegir una superficie lo más lisa posible. Por el contrario, si deseas incrementar agarre, tracción y retrasar el desgaste, usa neumáticos anchos, con compuesto de baja densidad (bajo TPI) y tacos gruesos.

Coste: desde 30 € (por cubierta).

Lubrica la bici con frecuencia (no sólo la cadena)

Por último, el correcto engrasado de las partes móviles de la bicicleta es una operación de mantenimiento sencilla, eficaz y poco costosa. Implica tanto la transmisión, como puntos de giro, dirección, tija, etc. Para la primera tener un buen lubricante, de aceite o cera, reducirá la fricción y garantizará un pedaleo fluido y cómodo. Para el resto tener siempre grasa de montaje a mano y aplicarlas en roscas, rodamientos, etc, permitirá una buena unión entre piezas, evitará crujidos, retrasará el desgate y evitará averías.

No escatimes nunca en la calidad del lubricante o la grasa de montaje. Te recomendamos que incluyan teflón, que aumenta las propiedades anti fricción y repele con eficacia polvo y otros restos de suciedad.

Coste: 10 - 20 €.

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