Jonas Vingegaard dejó sentenciado el Tour de Francia 2023 merced a una histórica exhibición en una contrarreloj propia de otros tiempos. Analizamos los datos que explican el triunfo del corredor danés y su rendimiento.
El Tour de Francia 2023 se estaba viviendo como un espectacular duelo entre los dos grandes favoritos al triunfo final, Jonas Vingegaard y Tadej Pogacar, marcado por la enorme igualdad entre ambos corredores.
Relacionado: Analizamos el recorrido del Tour de Francia 2023, las etapas clave
Tan solo 10 segundos distanciaban a Vingegaard, líder de la general provisional, de Pogacar, su inmediato perseguidor, tras 15 duras etapas y más de 2.500 kilómetros antes de llegar a la esperada contrarreloj de la 16ª etapa entre Passy y Combloux. Con un rendimiento similar ante el crono entre ambos contendientes y una distancia de tan solo 22,4 kilómetros, nadie imaginaba que el Tour de Francia 2023 iba a quedar visto para sentencia con una exhibición que quedará registrada en los libros de historia de la ronda gala.

Tiempos pulverizados
Wout Van Aert cruzaba la meta con un registro de 35 minutos y 27 segundos, un tiempo que le situaba en el hot seat como líder provisional de la etapa a falta de los mejores de la general. Tadej Pogacar optó por una estrategia arriesgada realizando un cambio de bici en la ascensión a Domancy y aún así pudo pulverizar el tiempo del corredor belga rebajándolo en 1 minuto y 13 segundos.
Pero detrás venía un auténtico cohete enfundado en un mono amarillo. Jonas Vingegaard trituraba todos los parciales con una cadencia bestial, realizando la ascensión final con la cabra y finalizando su exhibición en un tiempo de 32 minutos y 36 segundos.
En un recorrido de tan solo 22,4 kilómetros y teniendo en cuenta que, hasta ese momento, las diferencias entre los dos primeros clasificados se medían en segundos, Vingegaard endosó una ventaja de 1:38 a Pogacar o 2:51 a Van Aert.

Hay que remontarse a nombres como Armstrong, Indurain o Anquetil para encontrar diferencias superiores a un minuto entre el ganador y el segundo en una contrarreloj del Tour de Francia, pero en todos los casos la distancia de la etapa era muy superior.
Los datos de una gesta
El corredor del Jumbo Visma completó su cabalgada a una velocidad media de 41,23 km/h, que contrasta con los 39,29 Km/h de Pogacar o los 37,91 Km/h de Van Aert. Si buscamos mayor detalle, Vingegaard obtuvo una ventaja de de 3,01 segundos por minuto a Pogacar, 5,24 a Van Aert o 5,37 a Pello Bilbao, cuarto clasificado en la etapa.
Pero más contundentes son, si cabe, los datos que extraemos únicamente de la ascensión a Domancy, una subida de 6,3 km que incluye un puerto corto de segunda categoría, de 2.5 km pero con una pendiente media del 9,4% y picos del 11% de desnivel.

Vingegaard fue el más rápido en este tramo, insistimos sin realizar cambio de bicicleta, con un tiempo de 13:21, a una media de 28,3 km/h. Solo en este segmento obtuvo una renta superior un minuto a Pogacar, que fue segundo con 14:38 (25,8 km/h) y cerca de dos minutos a Pello Bilbao, tercero, con 15:01 (25,1 km/h).
Relacionado: las bicicletas de los 22 equipos del Tour de Francia
Como curiosidad, Vingegaard rodó con una Cervélo P5 en acabado raw, es decir, sin pintura, con el objetivo de ahorrar un puñado de gramos. Además optó por un desarrollo más suave que Pogacar, con un plato de 56 dientes en lugar de la elección de 58 dientes de su gran rival.