El ascenso del Gavia, uno de los míticos puertos del Giro de Italia, es una de las mecas del ciclismo mundial, tanto para aficionados como para profesionales. Pero sus 17 kilómetros de largo a una pendiente media del 8% (con rampas máximas del 16%), y un desnivel cercano a los 1400m por la vertiente sur que parte de Ponte di Legno, lo pueden llegar a convertir en un potro de tortura para todo aquel que se enfrente a él. Larga y agónica tortura, que una vez superada, es recompensada con una larga pero divertida bajada decorada por la belleza del paisaje alpino. Sólo hay que tener mucho cuidado con el estado del asfalto, que en este puerto es bastante malo en su parte alta. Disfruta de este vídeo de más de 15 minutos de intenso «downhill» sobre la bici de rueda fina.