Según los datos compartidos por la CONEBI (Confederación de la Industria Europea de la Bicicleta), 2020 ha sido todo un éxito en cuanto a venta de bicis.
La industria ciclista ha facturado 18,3 mil millones de euros por la venta de 22 millones de bicicletas, lo que supone un aumento en ingresos del 40% respecto a 2019.
Unas cifras que jamás se habían visto desde que se iniciara este tipo de recuento anual acerca del sector de la bicicleta, hace ya 20 años.
Ehrard Büchel, presidente de la CONEBI, ha resumido este crecimiento destacando "la pujanza de la demanda de los consumidores, las inversiones en infraestructura ciclista y el compromiso por una transición a una economía verde".
Esto es un claro reflejo de como la popularidad de la bici se ha disparado durante la pandemia, no solo con la venta de bicis en España, sino en los 27 países de la Unión Europea y el Reino Unido.
Unos datos que también se aprecian en las bicicletas eléctricas, que forman parte de esta nueva tendencia con un incremento en las ventas del 52% para llegar a los 10.600 millones de euros. 3,6 millones de e-bikes vendidas en Europa, fueron precisamente fabricada en nuestro continente, fomentando la producción local.
Todo esto también repercute en el medioambiente y se traduce en una reducción de más de 2 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año.
Además, el crecimiento ha impactado positivamente a la fabricación de componentes y accesorios y a la generación de empleo en este sector, que ha aumentado en un 30% de 2019 a 2020.
Se generan de tres a cinco puestos de trabajo por cada 1.000 bicis fabricadas al año en Europa, mientras que por cada 1.000 e-bikes se crean de seis a nueve empleos.