En mitad de toda la tormenta de declaraciones que lleva desatada desde el pasado diciembre, Chris Froome y el equipo Sky han decidido dar un paso al frente. Y no lo han hecho hablando de su caso, sino dando por comenzada su temporada 2018. Lo hará la semana que viene en la Vuelta a Andalucía. Es la forma que tiene el británico de decir que no tiene conciencia de ser culpable de nada.
Froome asegura llegar en una buena condición: “He entrenado muy bien en invierno. He metido un gran bloque de entrenamientos en enero, y ahora llega la hora de ponerlo en valor en la competición”, dice el tetracampeón del Tour antes de la carrera. Seguro que si viene lo dará todo.
Brailsford: “Lo apoyamos al completo”
Mientras Froome sigue centrándose en entrenar y competir, su director Dave Brailsford ha sido tajante sobre la posición del equipo: “No tenemos duda alguna. No ha hecho nada malo”, dijo en la rueda de prensa anterior a la Colombia Oro y Paz. De esta forma mostraba su respaldo al corredor: “En este momento, lo apoyamos completamente”.
De hecho, Brailsford ha reconocido que la situación no es para nada sencilla: “Sería de locos decir que la situación no es difícil. Queremos que la UCI lidere este deporte, luego tenemos las reglas de la AMA; y yo además tengo que mirar por el equipo y las personas que están en él. Pero creo que es inocente”, ha explicado, al tiempo que ha defendido que el caso “no debería haberse hecho público” hasta su resolución.
Como en 2015
La última vez que estuvo en tierras andaluzas, Froome ganó la carrera sobre Alberto Contador por un segundo de ventaja. De hecho, le dio la vuelta a la carrera en el Alto de las Allanadas, en La Guardia de Jaén. Allí le sacó 28 segundos al pinteño –que el día antes le había metido a él 27- y le acabó ganando la carrera: “Disfruté mucho cuando estuve y hace tiempo que no participo allí. Me gustó mucho la carrera”, comenta Froome.
Resulta que este año se repite la subida a las Allanadas –tres kilómetros y medio con rampas de hasta el 21%– como etapa reina de la carrera. Además, la carrera plantea otro final muy explosivo en el muro de Alcalá de los Gazules y después una contrarreloj individual de 13 kilómetros. Froome se convierte en el principal favorito a la victoria final en Barbate.