¿HASTA DÓNDE PUEDEN LLEGAR FRANCESC GUERRA Y LUIS LEAO PINTO EN LA CAPE EPIC?

¿HASTA DÓNDE PUEDEN LLEGAR FRANCESC GUERRA Y LUIS LEAO PINTO EN LA CAPE EPIC?

El final de la cuarta etapa de la Cape Epic cogió al equipo de Solo Bici en plena reunión de preparación de contenidos. Atentos unos a las palabras de los otros, tuvimos que hacer un alto en el camino para destacar el gran papel que estaban haciendo los integrantes del Buff Scott MTB, especialmente en su primera unidad, formada por Francesc Guerra y Luis Leao Pinto.

Lo cierto es que ambos no dejan de sorprendernos, gratamente por supuesto. Ya empezaron gustándose en el prólogo, donde fueron 3º, para después quedar el 11º en la primera etapa, 4º en la segunda, 7º en la tercera y este jueves de nuevo terceros; lo que fruto de sus resultados y de los de sus rivales, les deja quintos en la general a poco más de 14 minutos de los líderes: Jaroslav Kulhavy y Howard Grotts (InvestecSongoSpecialized).

Precisamente, el equipo liderado por el campeón checo de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 tuvo que conformarse de nuevo con la segunda plaza, víctimas una vez más de un pinchazo, tras los integrantes del Centurion Vaude, Nicola Rohrbach y Daniel Geismayr, que sumaban su primera victoria parcial de la carrera. Fue la de este jueves unas jornada títpica de la Cape Epic, con la salvedad que las pistas anchas de tierra cedían un protagonismo mayor a los senderos, y con el azote del viento.

Considerada por a organización como la etapa reina, de 111 kilómetros y 1800 metros de desnivel, vio también como la segunda unidad del Buff Scott MTB, Miguel Muñz y Enrique Morcillo, cerraba el top ten, como Ibon Zugasti y Alberto Losada (Orbea Factory) entraban el 25, con José Antonio Hermida y Joaquim Purito Rodríguez (Merida Factory Racing) los 31º.

En categoría femenina sigue la tiranía de Annika Langvad y Kate Courtney (Investec Songo Specialized), teniendo que destacar la 8ª plaza en la categoría mixta de Marc Sabaté y Mayalen Noriega (NomAdExperieNce).

Todo esto a las puertas de la penúltima etapa, una estresante contrarreloj de 39 kilómetros y 1430 metros de desnivel, que, como ya sucediera en 2010 con Nino Schurter y Christoph Sauser  en 2010 puede inclinar de forma definitiva la balanza hacia un lado u otro.

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