Acaba la temporada después de muchos meses entrenando casi sin tregua, y lo único que nos apetece es parar, tomar un respiro, disfrutar de los nuestros... Dedicar tiempo a todas esas cosas que no pudimos hacer durante el duro período de entrenamiento. Sin embargo, nos entra el remordimiento de si estamos parando mucho tiempo del mountain bike en invierno o si es aconsejable volver a entrenar para no perder el ritmo. En este artículo trataremos de resolver esa duda que a todos nos surge en pretemporada. Mountain bike en invierno, ¿Sí o no? Sabemos que el rendimiento viene determinado mayoritariamente por nuestra condición física, pero lo que nos da el punto extra es el aspecto psicológico. Por ello, el parar después de nuestra temporada nos ayudará a descansar tanto física como mentalmente, y esta última será la que nos ayude a volver a empezar la temporada con más ganas que la anterior. La recomendación general es tomar entre 2-4 semanas sin entrenamientos estructurados de ciclismo, pero esto no quiere decir que tengamos que estar todo el día en el sofá.
La mayoría de las adaptaciones conseguidas con el entrenamiento disminuyen tras dos semanas de inactividad, y esto será difícil de prevenir sin entrenar en bici. Pero no os preocupéis, estas adaptaciones se vuelven a recuperar con el entrenamiento, y recordad que no hay prisa en este período, que todavía queda mucho tiempo para entrenar. Para disminuir esta pérdida, podemos aprovechar para realizar otros deportes, y entre los bikers lo más habitual es correr o hacer senderismo. El tipo de ejercicio dependerá según el deportista, ya que a algunos les va muy bien correr mientras que a otros les puede crear problemas. Por ello, elige un deporte que te guste y realiza sobre 2-3 sesiones a la semana con una duración e intensidad media. También recuerda que la alimentación y la hidratación son importantes, no por estar fuera de temporada quiere decir que te puedas dar atracones todos los días. Así que intenta mantener una dieta saludable. Hay gente que disfruta tanto de la bici que aún después de una dura temporada, lo que más le relaja y despeja mentalmente es el propio entrenamiento en bici. Para estos, está claro que alejarlos de la bici lo único que hará será causarles más estrés, por lo que las recomendaciones serán distintas. Lo básico será disminuir la frecuencia de entrenamiento a un máximo de tres veces por semana. Estas sesiones tendrán que ser de menos duración (sobre dos horas) y con una intensidad baja en la mayoría de ellas. El mantener una sesión corta con algo de intensidad (por ejemplo tres series de cuatro minutos al 90 %) podría conseguir retrasar las desadaptaciones y mantener mejor nuestro nivel. Optimizar el tiempo Hay dos aspectos muy importantes a seguir en relación al mountain bike durante el invierno durante, y son la combinación del aspecto psicológico y fisiológico. Realizar actividades sociales que no hayamos hecho durante la temporada, algo que nos despeje la mente, y aprovechar para dedicar tiempo a otros hobbies a los que no hayamos podido prestar suficiente atención. Una buena opción podría ser ir de viaje con la familia o amigos a algún lugar de playa/montaña. Ser activos. Con esto me refiero a que intentemos mantener un poco de actividad física. Esto se consigue tanto yendo a andar a la montaña como cogiendo las escaleras en lugar del ascensor. El ser activos hará que nuestro cuerpo siga trabajando, aunque a ritmos más bajos, y esto retrasará las desadaptaciones. Fotos: Jesús Andrés Fernández