Es uno de los culebrones del verano, más parecido a las rocambolescas historias que se dan en el fútbol que al fichaje de un ciclista, pero ya está a punto de llegar a su fin. Si no hay otro nuevo giro de los acontecimientos, Iván Ramiro Sosa se va a convertir en corredor del Team Sky hasta el año 2021.
Y no pasaría de ser un fichaje de un ciclista talentoso y prometedor… si no fuera porque ya había sido anunciado, en plena Vuelta a España, como nuevo corredor del Trek-Segafredo para las próximas dos temporadas. Eso lo cambia todo, desde luego. El equipo italoamericano pagó la cláusula de rescisión al Androni, algo más de 120.000 euros, pero según el portal anglosajón Cyclingnews nunca se llegó a firmar un contrato.
Incluso Sosa llegó a difundir en un vídeo lo contento que estaba por entrar al WorldTour de la mano del equipo de Guercilena. Sin embargo, el interés del Sky creció y el fichaje empezó a tambalearse. Después de meses de tiras y aflojas, todo apunta a que Sky acabará ganando la partida, como era de esperar por una sencilla razón: su presupuesto es más alto que el de Trek, y por bastante.
De hecho, según la prensa británica el anuncio sería oficial esta misma semana y Sosa se encontraría con sus nuevos compañeros en la próxima concentración del equipo, que será en Mallorca a partir del 10 de diciembre. Dentro de un par de semanas, en definitiva. Incluso Brailsford habría previsto para él la participación en el Giro de Italia 2019 donde el equipo defiende el título de Chris Froome.
Así pues, de completarse este movimiento -que tiene todos los visos de hacerlo- el Team Sky se aseguraría a los dos grandes ciclistas del futuro, ambos colombianos y ambos del 97 que parece ser el próximo gran año de talentos, después del 94: Iván Sosa y Egan Bernal. Es buena forma de asentar los años venideros, desde luego.
