Prueba: BH iLynx Race Carbon, una e-bike con sensaciones de auténtico Cross Country

Redacción Solo Bici

Actualizado a 14/09/2022 00:00 CEST

La bicicletas eléctricas ultra ligeras son la sensación de esta temporada y nosotros hemos probado una de sus mejores (y más particulares) representantes: la nueva BH iLynx Race Carbon.

Las nuevas bicicletas eléctricas ligeras y de sensaciones naturales han pasado a copar los lanzamientos más recientes en materia de e-bikes. BH cuenta con una amplia flota de eléctricas de gran potencia y autonomía, repartidas entre sus gamas AtomX y Xtep, pero su desembarco en las denominadas light e-bikes se ha producido con la nueva BH iLynx Race Carbon.

Una bicicleta que se desmarca del resto de propuestas similares puesto que se trata de una plataforma de Cross Country súper deportiva que posee el mismo ADN racing que su homóloga no motorizada, la BH Lynx Race EVO.

De este modo, la BH iLynx Race Carbon se presenta con 100 mm de recorrido en cada eje o 120 mm delante y detrás en la versión LT como la que podéis ver en este vídeo. Es, por tanto, una bicicleta de Cross Country eléctrica real, y esto es algo que condiciona la experiencia en marcha como veremos más adelante. La familia iLynx se ha ampliado recientemente con el lanzamiento de la BH iLynx Trail, una montura similar a la que puedes ver en este artículo pero más musculada y de geometría más agresiva.

Estéticamente es extraordinaria y es, sin duda, una de las bicicleta eléctrica que menos parece una bicicleta eléctrica de la actualidad. El cuadro está fabricado al completo en fibra de carbono de alto módulo, incluyendo el basculante, y la integración de los elementos motrices es impecable, especialmente de la batería, que no es extraíble.

Gracias al uso de este material y de una tecnología específica en el moldeado del carbono, el peso del cuadro es de tan solo 2.200 gramos incluyendo el amortiguador, una cifra lejana a lo que estamos acostumbrados a ver en bicicletas de pedaleo asistido.

A simple vista cuesta diferenciarla de la BH Lynx Race y toma de esta bicicleta el esquema de suspensión Split Pivot, con el amortiguador semi integrado en el tubo horizontal y un punto de giro en el eje de la trasera, coincidente con la unión entre vainas y tirantes. Además, el cableado queda totalmente oculto, entrando por el cuadro desde la potencia, y cuenta con un bloqueo Across en la dirección que limita el giro del manillar para evitar impactos indeseados sobre el carbono.

Motorización marca de la casa

BH se ha beneficiado de sus más de 10 años de experiencia desarrollando bicicletas eléctricas instalando su propio motor, el BH 2ESMAG. Este motor ya lo hemos visto anteriormente en la gama Core de carretera y gravel, lo que refleja su concepción como motor apto para bicicletas ligeras e integradas.

Pesa tan solo 2,2 kilos y cuenta con un par motor máximo de 65 Nm, casi el doble que la potencia que ofrecen otras light e-bikes más veteranas. Además, sus dimensiones son muy compactas y esto permite ofrecer un factor Q de 163 mm, otorgando un pedaleo muy natural e intuitivo.

La batería es también una referencia en su segmento. A pesar de su tamaño compacto, la capacidad es extraordinaria, concediendo 540 Wh, de nuevo cerca del doble de otras propuestas similares. Y, para quienes quieran más autonomía, la BH iLynx Race Carbon cuenta con una batería externa que se instala de forma ingeniosa en el portabidón y no necesita ningún cable. Aporta 180 Wh más, para un total de 720 Wh, aunque añade también 980 gramos de peso.

La BH iLynx Race Carbon LT no cuenta con una gran pantalla LCD en la que visualizar multitud de parámetros. Para gestionar los 4 modos de asistencia que disponemos (Eco, Eco+, Power, Boost) nos servimos de un compacto mando que integra un pequeño testigo con colores en el que comprobar el modo escogido y la batería restante. Además, el propio mando vibra cuando cambiamos el nivel de asistencia y nos avisa cuando hemos llegado al modo Boost de máxima potencia.

No obstante, se puede vincular por bluetooth o tecnología ANT+ con cualquier ciclocomputador y visualizar todos los datos que deseemos, algo que consideramos bastante recomendable puesto que el código de colores del mando es casi imperceptible durante la marcha. También se puede emparejar con la app móvil Iconnect y gestionar con sumo detalle el nivel de asistencia y aceleración de cada uno de los modos e incluso el color que deseemos que luzca.

Montaje

La gama iLynx Race Carbon está formada por cuatro modelos, tres de ellos en versión LT y sólo uno, la tope de gama, configurada con 100 mm de recorrido y sin tija telescópica. Nuestra unidad de test es una BH iLynx Race Carbon Pro LT 7.8, siendo la segunda de la gama con un precio de 8.299,9 € y un peso extraordinario de 17,4 kilos en talla M y sin pedales. Está disponible en tres tallas (S, M, L) y nada menos que en 5 colores diferentes, aunque también está recogida en el programa de personalización exclusiva BH Unique.

El montaje es soberbio. El set de suspensiones está formado por una horquilla Fox 34 Float Step Cast y un amortiguador Fox Float DPS, ambos de la serie Factory y sin bloqueo remoto aunque sí se puede ajustar manualmente.

La transmisión recurre a un cambio trasero Shimano XTR combinado con el resto de elementos del grupo Shimano XT, incluyendo un cassette de 12 coronas de 10-51 dientes y un plato de 34 dientes. Las bielas, por cierto, llevan el sello de FSA y son de fibra de carbono. También responden al grupo XT del gigante nipón el juego de frenos, con discos de 203 mm en cada eje y pinzas de cuatro pistones. Una mordiente brutal.

El set de ruedas es pura deportividad. Está formado por llantas BH Evo C30 fabricadas en fibra de carbono y una generosa garganta interna, acompañadas por cubiertas Maxxis Arden y Ikon de 2,35 y un taqueado rodador.

En cuanto a los componentes periféricos destacamos la tija telescópica Bike Yoke Divine de tan solo 80 mm, un modelo muy utilizado en XC de competición. También nos ha gustado el manillar de carbono de 760 mm de ancho firmado por BH, montado junto a la potencia BH EVO 31 hueca en la dirección porque está preparada para instalar el kit de reparación FIT (no incluido de serie) lo que obliga a ser muy cuidadoso con el par de apriete.

En marcha

Y ahora vayamos a lo importante, cómo se comporta en marcha. El rendimiento de la BH iLynx Race Carbon LT está condicionado por su geometría. Sus cotas intentan ser lo más parecidas posible a su ‘hermana’ no motorizada y, por tanto, propone una postura mucho más deportiva y de ataque de lo que estamos acostumbrados en una e-bike. Desde la primera pedalada sentimos el feeling de bicicleta racing, con una posición que invita a pedalear con fuerza y nula contaminación de la pedalada.

Las vainas son compactas (453 mm) y, tanto el ángulo del sillín como el de la dirección (75,5 y 68,5 respectivamente), son más verticales que en otras e-bikes de perfil All Mountain. Por tanto, podemos desplazar el peso corporal sobre el eje delantero fácilmente y afrontar subidas muy pronunciadas con asombrosa facilidad. Por el contrario, imprime menos confianza en descensos técnicos que otras eléctricas más contundentes.

En cuanto al motor, llama la atención lo silencioso que es y la naturalidad en la entrega de potencia, haciendo casi imperceptibles los saltos de asistencia o el corte a 25 km por hora. Este motor no genera fricción cuando está apagado, así que podemos utilizar la iLynx Race sin asistencia como si de una bicicleta convencional se tratara.

Las cifras de potencia nos parecen muy equilibradas, con la suficiente entrega para afrontar retos muy exigentes, pero sin la artificialidad de los motores más potentes del mercado. No concebimos esta bicicleta como un remonte portátil.

Y algo similar sucede con la batería, con una capacidad muy superior a sus rivales, nos permite encarar desafíos de larga distancia sin temor a vaciarse rápidamente. Los datos de autonomía dados por la marca llegan a 175 km con la batería externa, pero es una cifra que no podemos tener en cuenta debido a la cantidad de factores que condicionan la autonomía que puede extraer un ciclista respecto a otro.

En conclusión, la BH iLynx Race Carbon es una bicicleta eléctrica muy completa. Se maneja con agilidad y nos adaptamos a su propuesta deportiva rápidamente. No es una bicicleta de Enduro, pero podemos afrontar segmentos técnicos con plenas garantías y disfrutar más que nunca de las subidas. Es una bicicleta ideal para aquellos ciclistas, y no son pocos, que no necesitan de una e-bike de grandes recorridos y geometrías muy lanzadas para disfrutar al máximo de recorridos variables y sensaciones de auténtico Mountain Bike.