Después de muchos años, quizás demasiados, utilizando diversos sistemas de suspensión exclusivos, GT vuelve a sus orígenes con un sistema de suspensión trasera.
I-Drive y AOS (Angle Optimized Suspension) han pasado a la historia y ahora la apuesta es por un sistema clásico de cuatro puntos de giro con Horst Link, sistema que ya utilizaron muy al principio de la historia de las dobles suspensiones de la marca.
Corría el año 1995 cuando emplearon el mítico sistema de suspensión LTS (Linkage Tuned System). Ahora, en 2019, vuelven a aquel concepto en sus nuevos modelos de la GT Force y de la versión más trail, la Sensor.
¿Y cuál es el secreto del LTS? Pues que es un sistema con punto de giro en las vainas, junto con el eje de la rueda trasera, y una bieleta de desmultiplicación. Un sistema de 4 puntos de giro.
Al fin y al cabo, muchas veces lo clásico es actual. Y ojo con lo clásico, porque la nueva GT Force es la herencia de un ganador, Martin Maes, polivalente corredor de enduro de primer nivel. Estuvo corriendo y desarrollando este nuevo modelo durante la pasada temporada. El resultado es la nueva GT Force.
Renovando lo clásico
Evidentemente, aunque en GT han vuelto a un sistema de suspensión que ya habían utilizado en el pasado, el cuadro está trabajado al máximo para ser una bici actual. Y se ha conseguido.
El triángulo delantero de la Force Carbon está fabricada en carbono, mientras que el basculante es de aluminio. Esta combinación es debida al hecho de que la rigidez y algo de flexión de la trasera es una de las prioridades, por lo que de esta manera es la combinación perfecta.
Si a esto le añadimos las dimensiones de tirantes y vainas, no hay más que decir. Pero hay otros puntos también en que se ha dado prioridad a la rigidez. Solo hace falta echarle el ojo a la zona de la pipa de dirección y del pedalier.
Ambas estructuras son muy generosas y se consigue así el cometido de ser indestructibles. Como no puede ser de otra manera, esto, al final, pasa factura al peso, pero la rigidez está sobradamente asegurada.
Destaca el guiado de los cables por la parte superior del tubo diagonal. En él, han diseñado una hendidura para que queden escondidas, de nombre Grove Tube, que no nos complicará la vida como lo pueden hacer los cableados internos, en caso de que queramos hacer reparaciones o mantenimiento nosotros mismos.
En el diseño de la suspensión trasera, además de los cuatro puntos de giro y el Horst Link ya mencionados, se ha otorgado un diámetro generoso en cada uno de ellos, además de los rodamientos sellados correspondientes. Esto, además de mayor rigidez, hará que la suavidad de funcionamiento sea óptima.
Sin lugar a dudas, en GT se ha apostado por conferirle a la Force una rigidez extrema y asegurar un sistema de suspensión activo y suave. Esas son sus grandes bazas.
Todo a buen nivel
Teniendo la calidad de cuadro con que cuenta la GT Force Carbon, los componentes tenían que estar a la altura, empezando por las suspensiones.
Ambas son de la gama Factory de FOX; la horquilla, una 36 Float de 160 mm de recorrido, y el amortiguador, un Float DPX2. En cuanto a la transmisión, la apuesta es por SRAM, con bielas Truvativ Descendant, cambio X01 Eagle y el resto GX Eagle.
Las ruedas son unas Stan’s No Tubes Flow MK3, con unos neumáticos Schwalbe Magic Mary; en frenos se confía también en los SRAM Guide RS; en manillar y potencia en Race Face, con la gama de aluminio Aeffect, y la tija de sillín es una KS Lev de carbono y 125 mm de recorrido.
El sillín es un Fabric Scoop, que si bien puede sorprender por ser una marca hermana de Cannondale, cabe decir que GT es prima hermana de estos, ya que todas ellas pertenecen a Cycling Sports Group. En definitiva, unos componentes que al final dan un peso de 14,780 kg al conjunto.
A tope
Lo mejor de todo cuando probamos una bici es eso, el momento de probarla y de ver hasta dónde puede llegar. Y la verdad es que, en el caso de la GT Force, eso es mucho decir, porque los límites los pondrás tú.
Para empezar, las diferencias geométricas de las dos posiciones posibles mediante el Flip Chip son notables. A nosotros nos gustó el comportamiento de la posición Low, aunque, a decir verdad, el pedalier queda demasiado bajo si pedaleas por zonas rotas, ya que es fácil golpear con las bielas en el suelo. A pesar de ello, nosotros fuimos así, asumiéndolo.
Se muestra tremendamente absorbente en cualquier situación, con unas suspensiones muy activas en todo momento. También nos ha gustado su agilidad, que si bien es mayor con la posición High, es más que suficiente el Low.
La verdad es que cada posición tiene sus ventajas y sus desventajas, por lo que lo mejor es probar y decidir cada uno.
Subiendo es cuando te acordarás del peso de la bici. A decir verdad, se nota pesada y el “algo de movimiento” intrínseco del sistema con Horst Link hará que tengas que bloquear si eres muy maniático.
La GT Force ha demostrado que las 27,5”, que muchos de nosotros queríamos enterrar hace unos meses, tienen mucho sentido y lo seguirán teniendo. Al fin y al cabo, si lo que buscas es la máxima agilidad, tienen sentido, aunque pierdan algo de estabilidad y direccionalidad a altas velocidades.
Solo hace falta ver las bicis con las que compiten los mejores bikers de enduro del planeta. ¿Quieres ser uno de ellos?
Valoraciones
Cuadro: 4/5 – La calidad y los acabados del cuadro son de marca grande. Quizás el basculante en aluminio desmerece algo el conjunto, aunque cumple perfectamente su función.
Transmisión: 4,5/5 – SRAM Eagle con 12 coronas, ideal para una como la Force. Lo único que cambiaríamos es el plato, con 30 dientes. Si te gusta hacer desniveles pronunciados, con el 32 se sufre demasiado.
Suspensión: 4,5/5 – Tanto delante como detrás, la respuesta es muy buena. Destaca el amortiguados DPX2, que gracias a un trabajado sistema de suspensión trasero rinde de manera óptima.
Eficacia pedaleo: 4/5 – Lógicamente, no esperes que sea su fuerte. Siendo una bici de 150 mm de recorrido con una clara vocación de absorción, se mueve. El punto de giro Horst Link es en gran parte el responsable.
Frenos: 4/5 – Nos encanta el tacto y la progresividad de los frenos SRAM. Lástima que nos acostumbramos a lo bueno y el RS no lleva el ajuste de acercamiento de pastillas al disco. Aun y así, muy bien.
Ruedas: 3,5/5 – Correctas. Funcionan como es de esperar, aunque nos gustaría poder contar con algún modelo que se sienta más ligero. Los neumáticos también ayudan al peso final.
Neumáticos: 4/5 – Sin llegar a ser nuestros neumáticos preferidos, cumplen correctamente las necesidades de una bici como la Force. No esperes un superagarre, pero cuentan con un muy buen equilibrio.
Calidad-Precio: 4/5 – La verdad es que nos gusta ver cómo GT, siendo lo que llegó a ser, esté en la senda correcta de nuevo con unos modelos muy equilibrados y más que correctos, tanto por funcionamiento como por precio.
Ficha técnica
General
Bici: GT Force Carbon Pro
Precio: 5.499 euros
Peso: 14,780 kg
Cuadro
Material: Carbono en triángulo principal y aluminio en basculante
Tallas: XS, S, M, L y XL
Suspensión
Horquilla: FOX 36 Float Factory, 160 mm de recorrido
Amortiguador: FOX Float DPX2 Factory
Transmisión
Pedalier: Truvativ Descendant, 32 dientes, 170 mm
Casete: SRAM XG-1295 Eagle, 10-50, 12 velocidades
Cadena: SRAM GX Eagle
Mandos de cambio: SRAM GX Eagle
Cambio: SRAM X01 Eagle
Ruedas
Llantas: Stan’s No Tubes Flow MK3
Bujes: All Terra Alloy Boost 15 x 110 mm delantero, All Terra Alloy Boost 12 x 148 trasero
Componentes
Neumáticos: Schwalbe Magic Mary Performance 27.5×2.35” Tubeless Ready
Frenos: SRAM Guide RS
Discos: SRAM certerline de 200/180 mm
Manillar: Race Face Aeffect, 35 mm diámetro, 780 mm
Potencia: Race Face Aeffect Aluminio, 35 mm
Dirección: Integrada, 1-1/8 – 1,5”
Tija de sillín: KS LEV Ci Carbon, 31,6 mm, 125 mm de altura
Sillín: Fabric Scoop Shallow Sport
Más información
Contacto: Blue Factory Team, S.L.U., [email protected]
Website: www.mondraker.com/es/
Galería
Fotos de estudio: Santi Díaz // Fotos de acción: Carlos García