Prueba Focus 01E Pro: Es Competición

Los ingenieros de la marca germana se han desmarcado un tanto de las tendencias actuales respecto a las nuevas bicis de XC. Muchas de ellas intentan emular la geometría y ángulos de sus modelos hardtail e intentan que estas sean muy parecidas. Supercortas y reactivas.

Incluso en algunos casos plagian el mismo Reach. No es el caso de Focus y su O1E. Como hemos podido comprobar durante estos días de prueba, Focus ha puesto tierra de por medio para diferenciar muy claramente las aptitudes de su bici de doble suspensión y su hardtail, la Raven. Esta Focus 01E Pro es una doble pensada para aportar grandes dosis de absorción y estabilidad en los circuitos más técnicos. Una bici, aun siendo para XC, noble de reacciones.

Familia corta

Nosotros hemos probado el modelo de entrada a la gama, el Pro. La familia 01e la conforman cuatro únicos modelos, todos ellos fabricados íntegramente en carbono, tanto cuadro como basculante, así como sus dos características bieletas.

Por tanto, tenemos una excelente base en carbono, muy buena para poder aligerar la bici con el paso del tiempo limando algunos gramos en periféricos y juego de ruedas, por ejemplo. Focus solo reserva su espectacular cuadro de tan solo 1.830 g, la réplica del que emplea el actual campeón de Europa Florian Vogel en el equipo Focus XC Team, para su modelo tope de gama, el Factory.

Los tres restantes, entre los que se encuentra el Pro, es el carbono normal, que ofrece unas mismas cotas de rigidez y acabados a cambio de algunos cientos de gramos más.

Sistema F.O.L.D.

Comencemos por descifrar las siglas. Este sistema se ha denominado Focus Optimized Linkage Design. Lo más característico es que todo el mecanismo de amortiguación se sitúa justo debajo del ciclista y en un punto muy cercano al suelo, por lo que aporta rigidez y control a la bici.

Buscan lograr un reparto de pesos muy centrado, con un centro de gravedad lo más bajo posible, que facilite el manejo de la bici en los momentos más comprometidos. En cuanto a su sistema, se trata de un clásico monopivote que, en vez de jugar con la curva de la compresión a través de una sola bieleta, lo más usual en las bicis más punteras de la actualidad de doble suspensión para XC, decide hacerlo a través de dos bieletas.

El objetivo es conseguir que la amortiguación trabaje con dos curvas de compresión bien diferenciadas. Una primera parte del recorrido de la suspensión ideada para tener buena sensibilidad con el terreno e interactuar con los pequeños impactos (el talón de Aquiles de muchas bicis de XC con sistema monopivote no articulado). Y otra para la parte final del recorrido del amortiguador ajustado, para gestionar los impactos más fuertes o sostenidos sin realizar topes, que lo dotarán de un carácter más progresivo.

El basculante trasero es espectacular. Está fabricado de una sola pieza en carbono y es simétrico. Solo sobresale el anclaje en la cara interna del tirante izquierdo para poder montar, si se deseara (algo a estas alturas y para esta bici con poco sentido), una transmisión de doble plato.

“Me siento seguro”

Nosotros hemos tenido que jugar con las presiones del amortiguador hasta dar con el equilibrio ideal para dotar a la bici de una notable efectividad de pedaleo. Empezamos utilizando un 20% de sag y acabamos por emplear algo más de presión dejando el sag en cerca de 15%. Una configuración algo más dura, más XC, que, aunque perdemos algo de interactuación y confort con el terreno, ganamos en mayor apoyo para economizar nuestro pedaleo.

Creemos que un amortiguador con tres posiciones, el clásico Propedal de FOX, contribuiría a poder disfrutar por un lado de la excelente sensibilidad de la bici y en posición intermedia ofrecer un tarado más XC, más duro, con menos interactuación del sistema. Por todo ello hemos percibido esta 01E como una máquina ideal para acometer los caminos más exigentes con seguridad y efectividad. Ahí donde con una rígida sufrimos con la 01E disfrutamos, pues posee gran aplomo y estabilidad. A las virtudes de su sistema de suspensión debemos añadirle una distancia entre ejes generosa, especialmente condicionada por sus grandes vainas de 448 mm y un Reach también largo (en nuestra talla M, 435 mm).

Valoraciones

Cuadro: 4,5/5 – Sólida, rígida y full carbono (también el basculante). La geometría busca más la estabilidad. Posee una distancia entre ejes bastante generosa, comparada con otras XC dobles más cortas y nerviosas.

Transmisión: 4,5/5 – Lo que no hayamos dicho ya a estas alturas del grupo de doce velocidades más popular de 2018… Simple, con un rango de desarrollo ideal para XC. El cuadro permite montar transmisiones 2x.

Suspensión: 4/5 – Nos agrada la sensibilidad que transmite en el primer tercio del recorrido, muy activa, que contrasta con el tercio final, más progresivo, ideal para absorber grandes impactos y evitar hacer topes.

Eficacia pedaleo: 3/5 – Correcta. Una posición intermedia, de la suspensión, tipo propeal en el amortiguador, ofrecería mejor soporte para economizar todavía más nuestro pedaleo.

Frenos: 3,5/5 – Muy potentes, especialmente el delantero, dotado de un disco de 180 mm. El tacto, con el uso continuado, se torna algo menos modulable y obliga a jugar con el recorrido de las manetas.

Ruedas: 3,5/5 – Cumplidoras. Nos agrada la calidad de giro de los bujes DT Swiss. Son lo más. En cuanto a peso/ rigidez, no destacan especialmente en ninguno de los dos aspectos, pero tampoco desentonan…

Neumáticos: 3,5/5 – Un montaje ideal para el XC en clave rendimiento. Son unos neumáticos con perfil de taco muy bajo, ideales para ir rápido en terreno compacto. Son muy ligeros, pero algo propensos a sufrir pequeños cortes.

Calidad-Precio: 4/5 – Como modelo de entrada, la relación entre calidad y precio es más que correcta. Un montaje muy sólido a un precio muy apetecible para los que buscan una doble de XC en carbono.