Prueba: Merida eOne Sixty 8000, reivindicando las e-bikes poderosas

Redacción Solo Bici

Actualizado a 28/07/2022 00:00 CEST

Las e-bikes de largo recorrido, motor potente y batería de gran autonomía siguen siendo las reinas de la montaña y nosotros probamos una de sus mejores representantes, la Merida eOne Sixty 8000.

Sin lugar a dudas esta temporada el protagonismo en cuanto a lanzamientos más glamourosos en territorio de bicicletas eléctricas se lo han llevado las nuevas plataformas de light e-bikes muy ligeras e integradas. Pero no olvidemos que las e-bikes más potentes y de mayor autonomía siguen siendo la opción más vendida en el mercado y la más presente en nuestras montañas y senderos.

Es por ello que en esta ocasión probamos una de las mejores representantes de este segmento, la Merida eOne Sixty 8000. Esta veterana e-bike fue presentada hace ya tres años, pero ha sabido actualizarse a base de pequeñas modificaciones que la han mantenido totalmente vigente hasta la actualidad. En esta vídeo prueba puedes ver nuestras primeras impresiones.

Composición mixta

La gama eOne Sixty 2023 está formada por cinco montajes, tres de carbono y dos íntegramente en aluminio. En Solo Bici hemos podido probar la Merida eOne Sixty 8000, una bicicleta con un montaje extraordinario y un precio final, de 7.299 €. Aunque es elevado, a nuestro juicio no resulta nada excesivo, teniendo en cuenta todo lo que ofrece.

Se trata de una plataforma Mullet o mixta, es decir, con rueda delantera de 29 pulgadas y trasera de 27,5. El cuadro está facturado en fibra de carbono en el triángulo delantero y aluminio en el basculante y la bieleta principal. El carbono de Merida incrementa la resistencia en un 40%, gracias al uso de resina epoxy con nano partículas, mientras que el aluminio recibe un tratamiento de hidroformado para reducir su peso, con las soldaduras perfectamente pulidas.

La Merida eOne Sixty 8000 es una bicicleta de Enduro y como tal propone 160 mm de recorrido delante y 150 mm detrás. Quienes busquen un modelo más versátil o comedido, Merida cuenta con la eOne Forty. Una réplica del modelo que probamos, aunque con 140 y 133 mm de recorrido y una geometría ligeramente más conservadora.

Alta potencia y autonomía

La unidad motriz es el elemento que más se ha actualizado en la Merida eOne Sixty 8000. Uno de los motivos por los que esta segunda generación eOne Sixty fue desarrollada en fibra de carbono, además de los beneficios en ligereza y rigidez, es la evidente mejora en la integración de los elementos, especialmente de la batería.

A pesar de ser lanzada inicialmente con el motor Shimano E8000, en la actualidad cuenta con el potente Shimano EP8, con un par motor máximo de 85 Nm. Lo mismo sucede con la batería, que ha pasado con el tiempo de los 503 Wh iniciales a una capacidad superior de 630 Wh, sin necesidad de modificar el diseño. El powerpack de Shimano queda perfectamente integrado en el tubo diagonal de forma discreta y elegante. Además, es extraíble y no necesita de una llave de seguridad. Se puede retirar la goma protectora externa y con una llave Allen extraer la batería para transportarla. Cabe destacar que, por una cuestión de dimensiones, la talla XS no puede dar cabida a la batería de 630 Wh y equipa una de 504 Wh.

Como primer fabricante mundial, Merida ha cuidado al máximo la tecnología aplicada en su gran bicicleta eléctrica y prueba de ello son estas ‘ventanas’ practicadas en el extremo superior del tubo diagonal, junto a la pipa de la dirección. Están fabricadas en aluminio y se denominan Thermo Gates. Su función es la de evacuar el calor generado por la batería. Una forma natural de refrigerar el sistema y optimizar sus prestaciones basada en el principio de que el calor tiende a ascender. Además sirven como puerto de entrada para el cableado en el interior del cuadro.

El motor puede encenderse y apagarse a través del botón ubicado en el tubo horizontal, aunque también contamos con un pulsador secundario en el tubo diagonal. La carga de la batería se puede realizar directamente sobre el cuadro por un puerto de carga colocado sobre el eje de pedalier. Su ubicación lo protege de impactos o salpicaduras. Pero al estar colocado sobre una base plana, es una zona que tiende a acumular suciedad.

El motor Shimano EP8 cuenta con los tres modos clásicos de asistencia (Eco, Trail, Boost) así como el siempre práctico modo walk assist. Todos ellos los podemos seleccionar desde un compacto mando en el manillar con dos botones de amplias dimensiones. Y desde el display podemos visualizar el modo de asistencia escogido así como multitud de parámetros, desde la distancia recorrida, la autonomía, velocidad media y, por supuesto, la batería restante. A través de la app móvil Shimano E-Tube podemos realizar ajustes precisos de cada modo de asistencia, desde el par motor hasta la velocidad de salida de la potencia. Una herramienta imprescindible para personalizar todo el sistema motriz acorde a nuestro estilo de pilotaje.

Montaje premium, precio contenido

El modelo Merida eOne Sixty 8000 propone un montaje propio de alta gama y, sin embargo, el catálogo de la marca todavía cuenta con dos modelos por encima de éste (eOne Sixty 9000 y 10K). La selección de componentes es muy inteligente para otorgar un comportamiento en marcha exquisito sin disparar el precio final.

Destaca en primer lugar la horquilla Marzocchi Bomber Z1 específica para e-bikes. Posee barras de 36 mm y ajuste de la compresión hasta bloquear el recorrido. Fox adquirió, y casi resucitó, la marca Marzocchi hace unos años y por ello el mecanismo interno es el propio de una horquilla de la marca del zorro.

Detrás, el amortiguador sí es un Fox Float DPX2 de la serie Performance. Permite un mayor rango de ajustes incluyendo el bloqueo de la compresión. Juntos proporcionan una suspensión extremadamente suave y sensible, como si de una alfombra se tratase.

En la transmisión encontramos una mezcla de elementos Shimano XT y SLX, con presencia de un cassette Linkglide de 11 coronas y de 11 a 50 dientes. Esta tecnología fue desarrollada por la firma nipona específicamente para e-bikes y persigue minimizar el desgaste prematuro del dentado y prolongar la vida útil de la transmisión en bicicletas que someten a mucha tensión a los elementos del cambio. Los frenos Shimano SLX, por su parte, cuentan con pinzas de 4 pistones y grandes discos de 203 mm delante y detrás.

Las ruedas, firmadas por la propia Merida, están montadas sobre llantas de aluminio de un ancho generoso de 29 mm y bujes Shimano XT. Cada aro posee un neumático diferente, aunque ambos con el sello de Maxxis. Delante es un Assegai de 2.5 pulgadas de ancho y detrás un Minion DHR II de 2.6 pulgadas, ambos con una carcasa EXO+ 3C muy reforzada. El cuadro acepta cubiertas de hasta 2.8 pulgadas siempre que se trate de ruedas de 27,5”.

El resto de componentes periféricos tienen el sello de Merida, y cumplen con solvencia. Destacamos la tija telescópica con recorrido de 100 a 170 mm según la talla o el manillar de 780 mm con bloqueo desde la dirección para evitar que impacte en el manillar.

Ponen la guinda una serie de recursos útiles muy bien integrados. En el frontal contamos con un foco Lezyne de 310 lúmenes que se alimenta de la propia batería de la bicicleta. Además el eje trasero integra una llave allen de dos medidas y, por si no fuera suficiente, debajo del sillín contamos con una completa multiherramienta protegida por una tapa de goma.

El peso de la Merida eOne Sixty 8000, en talla S y sin pedales, es de 23,78 kg.

En marcha

Estamos ante una bicicleta eléctrica de Enduro. El recorrido de la suspensión y las cotas de la geometría nos revelan que se trata de una e-bike contundente, diseñada para acometer todo tipo de descensos técnicos. Y, sin embargo, lo primero que tenemos que destacar es su agilidad. Subidos sobre ella sentimos el cuadro compacto y podemos moverlo con facilidad en terreno revirado.

Y es que la geometría es más bien equilibrada dentro de su segmento y la bicicleta se aprovecha de las posibilidades que ofrece contar con una rueda de cada diámetro. Así, el triángulo trasero es compacto, con unas vainas de 439 mm y una altura del pedalier muy baja, lo que multiplica la sensación de control. Por el contrario, el frontal eleva la altura de la dirección y lanza la rueda delantera a 65,5º, mejorando la estabilidad y el paso por obstáculos.

El motor Shimano EP8 está totalmente consolidado en el mercado y destaca por su equilibrio entre un tamaño compacto, un comportamiento silencioso, una entrega de potencia suave en la entrada y poderosa en la máxima asistencia. En una temporada dominada por nuevas bicicletas eléctricas de menor potencia y autonomía, siempre es agradable recordar lo divertidas que son las e-bikes tan poderosas como la Merida eOne Sixty 8000.

En definitiva, la eOne Sixty es una bicicleta eléctrica muy completa, que huye de cotas radicales para ofrecer una experiencia más polivalente. Está preparada para acometer descensos muy técnicos, pero también ofrece una postura de pedaleo cómoda y una geometría equilibrada para disfrutar de ella en todo tipo de caminos de montaña.