Sometemos a una intensa prueba de larga duración las nuevas zapatillas de alto rendimiento de la firma norteamericana. Más de 5.000 kilómetros con las Specialized S-Works Torch para desgranar cómo rinde sobre el asfalto toda su tecnología.
Hemos acumulado más de 5.000 kilómetros rodando con las nuevas Specialized S-Works Torch, unas zapatillas que fueron presentadas por la firma de Morgan Hill el pasado mes de mayo y que analizábamos en este artículo. Además, hemos concentrado nuestro test en los meses más calurosos del año, lo que nos ha permitido exprimir las funciones de ventilación y resistencia a las altas temperaturas de este calzado.
La gama Torch no es nueva en el catálogo de Specialized. Tradicionalmente ha sido el modelo de zapatillas ubicado en la gama media, recogiendo buena parte de la tecnología del calzado más exclusivo, pero a un precio más asequible. Esta generación supone el estreno en el sello S-Works, con la exclusividad y carga tecnológica que ello implica. Eliminan, por tanto, a las S-Works 7 apostando por un salto cualitativo en términos anatómicos y biomecánicos sin perder un ápice de rendimiento.
Libertad al pie
Así, las nuevas Specialized S-Works Torch son la evolución de más de 100.000 datos obtenidos a través de su sistema de bike fitting Retül. Con toda esta información Specialized ha comprendido que una zapatilla ligeramente más ancha mejora el rendimiento del ciclista. ¿Cuál es el motivo? Independientemente de la anchura del pie, una zapatilla más ancha favorece el riego sanguíneo puesto que el pie se expande de forma más natural, haciendo la experiencia en bicicleta más cómoda y eficiente.
Siguiendo este principio, las Specialized S-Works Torch aumentan su anchura en 4 mm respecto a medidas estándar y nada menos que 8 mm sobre las S-Works 7. No se ofrece, por tanto, un modelo específico con una horma superior sino que desde su propia concepción las nuevas Torch son más anchas.
Sin embargo, la anchura no es la única diferencia de estas zapatillas respecto a los modelos precedentes de alto rendimiento en carretera de Specialized. En el apartado estético desaparece la cinta de velcro del empeine apostando por dos diales BOA S3 de aluminio y la punta es más redonda. La conjunción del nuevo diseño y este cierre micrométrico bien repartido evita la aparición de pliegues en el tejido, favorece un ajuste muy homogéneo y, algo que nos ha gustado especialmente, hace muy fácil la maniobra de ponernos y quitarnos la zapatilla.
Otra de las novedades fundamentales en las Specialized S-Works Torch es la desaparición del tejido Dyneema en la zona superior de la zapatilla. En este caso se ha optado por un diseño multicapa reforzando las áreas más expuestas, obteniendo una protección similar a la que lograba el Dyneema pero con mayor feeling de rigidez y comodidad y, como decíamos, esquivando la aparición de pliegues.
Tecnologías biomecánicas
El concepto Body Geometry da un nuevo salto cualitativo en las S-Works Torch. Se trata de una tecnología de soluciones biomecánicas apoyadas en datos científicos que la marca lleva perfeccionando desde 1997. El objetivo es mejorar la alineación de las articulaciones de la pierna del ciclista para aliviar la carga y prevenir lesiones.
Aquí encontramos un alzamiento de la cuña varo de 1,5 mm, logrando que la suma de rodilla, pie y cadera quede alineada incluso en la pedalada más potente. El arco longitudinal del soporte del pie se ha modificado para que el pie esté en contacto con la suela en todo momento. Así se logra evitar el ‘colapso’ del pie y ayuda a imprimir más potencia sobre el pedal.
Y, dentro de estas soluciones biomecánicas, quizá las más curiosa y perceptible sea el botón metatarsal. El diseño eleva y separa los huesos del antepié evitando que se compriman los nervios. En la práctica se traduce en una excelente colocación de los dedos de los pies, abiertos y repartidos de forma natural, sin roces y con un tacto cómodo. Incluso en tiradas muy largas a grandes temperaturas no hemos apreciado el hormigueo o entumecimiento tan habitual en calzado de ciclismo de alto rendimiento.
Suela de mayor grado
Por supuesto, mención aparte merece la suela, el elemento más importante en una zapatilla de competición como estas Specialized S-Works Torch. Está fabricada en fibra de carbono con el mayor grado de rigidez de Specialized (15). El diseño se ha optimizado con un soporte para el talón más ancho, un dibujo escalonado de los laterales que favorece la evacuación de la suciedad y la aerodinámica y con una ‘viga’ o nervio central denominado I-Beam que refuerza la rigidez de toda la estructura. Con todo esto, solo en la suela se rebaja el peso en 20 gramos respecto a las anteriores S-Works 7.
Con toda esta carga tecnológica, el peso de las Specialied S-Works Torch en talla 43 es de 230 gramos cada zapatilla sin cala.
En marcha
Como hemos mencionado anteriormente, la impresión inicial al calzarnos con ellas es la naturalidad con la que se integra el pie dentro. No hay rastro de la habitual sensación tosca de unas zapatillas de carretera ultra ligeras y muy rígidas. En cambio, parece que ya hubiéramos sumado cientos de kilómetros con ellas y se hubieran adaptado a nuestro pie. Sin duda, la horma ancha coloca los dedos de los pies con naturalidad, una sensación cercana a la de ir descalzos.
También queremos poner en relieve el salto estético logrado con las Specialized S-Works Torch, una cualidad relevante teniendo en cuenta el precio de estas zapatillas. Su diseño apuesta por el minimalismo, sin grandes mallas de ventilación ni costuras visibles. La transpiración corre a cargo de microperforaciones repartidas por todo el tejido externo y una ventana frontal en la puntera de la suela. Como puedes ver en las imágenes, nuestro par de test es en un elegante color negro, también están disponibles en blanco y en un curioso color verde oliva denominado Oak. Una lástima no encontrarlas con colores más atrevidos incluso.
Ya sobre la bicicleta, se sienten muy firmes, con una gran sujeción. Resulta curioso el contraste entre una apariencia exterior compacta y un espacio interior más ancho de lo común. La cuña de la planta es más pronunciada que en otras zapatillas de Specialized y requiere de un pequeño periodo de adaptación hasta que interiorizamos este tacto. Una vez normalizado podemos percibir todo el apoyo que nos proporciona esta base longitudinal.
Con el paso de los kilómetros comprobamos que estas S-Works Torch no son sólo más cómodas, también son más rápidas, llevan impreso el ADN de competición asociado a Specialized. En comparación con las S-Works 7, se perciben más rígidas y soportan mejor la potencia de la pedalada. Esta transferencia de fuerza del pie al pedal es más estable e intuitiva, especialmente en el momento de la arrancada. Como si toda la suela trabajase de forma conjunta y no con unos puntos de mayor presión sobre otros. Esta homogeneidad en la estructura de la suela (y de la zapatilla al completo) es uno de los aspectos que más nos han gustado de estas zapatillas.
La ventilación y evacuación del calor en condiciones de altas temperaturas es correcta. Genera un buen flujo de aire, teniendo en cuenta el minimalismo de su diseño, pero lo más valioso es la ausencia de molestias tras sumar horas de ruta, sin sobrecalentamiento del interior. En este caso no se ha apostado por una ventilación extrema sino por evitar la acumulación del calor interno a través de una posición cómoda y abierta del pie.
Además, el paso del tiempo, los kilómetros y las inclemencias no alteran su forma, algo que sí sucedía con el tejido Dyneema. No se crean pliegues ni deformaciones por hormas demasiado estrechas, el acabado después de meses de intensas pruebas, acumulando más de 5.000 km con ellas, es como si del primer día se tratase.
En el lado opuesto, debemos señalar que su minimalismo y peso ultra ligero implica también una ausencia de grandes refuerzos y algunas zonas propensas a roces o impactos quedan muy expuestas, incluyendo la suela, que presenta una única pieza de soporte en el talón, reemplazable. Quienes no sean especialmente cuidadosos con ellas terminarán, inevitablemente, con roces y arañazos en la punta, el lateral trasero y la suela.
En definitiva, las nuevas Specialized S-Works Torch destacan sobre otras propuestas de máximo rendimiento por su plataforma de posición natural del pie, una estética depurada con multitud de tecnologías integradas y una excelente rigidez en la transmisión de la potencia sobre la bicicleta. Propiedades tan difíciles de encontrar en una sola zapatilla que, en cierto modo, justifican su elevado precio.
Ya sabemos que, en ciclismo, las ganancias marginales son las que marcan las diferencias y en este nivel de exclusividad el precio lo es también. Recordemos de 5 de los últimos 7 campeones del mundo en ruta lo han sido calzados con unas zapatillas S-Works. ¿Conseguirán estas Specialized S-Works Torch un nuevo arcoíris este año?
- Horma ancha y cómoda en calzado de alto rendimiento.
- ‘Empaque’ de la suela.
- Diseño minimalista con tecnología integrada.
Specialized S-Works Torch / Ficha técnica
| Modalidad | Carretera |
| Ajuste | Dial Boa S3 de aluminio |
| Suela | Fibra de carbono índice de rigidez 15 |
| Tallas | 37-48 |
| Colores | 3 (negro, blanco, verde) |
| Peso | 230 gramos (la unidad en talla 43 y sin calas) |
| Precio | 440 € |
Puedes ampliar la información de estas zapatillas y conocer la disponibilidad de la marca en tiendas en el site específico de Specialized España.