Los pasos expuestos a caídas, precipicios, etc, requieren no sólo de buenas habilidades técnicas con la bicicleta de montaña. También de fortaleza mental y grandes dosis de precaución. Te damos una serie de consejos para que ruedes sobre senderos expuestos con total seguridad.
Son habituales de zonas de alta montaña. Aunque también nos los podemos encontrar a baja altura, cercanos a cauces de ríos, y, en general, en la mayoría de rutas. Alguna vez vas a tener que atravesar un sendero expuesto y debes estar preparado.
Por ello estos consejos o trucos de técnica te permitirán manejar correctamente la bici sin riesgo de precipitarse por el precipicio. Además, el manejo de la bicicleta debe ir, inevitablemente acompañado, de la máxima concentración a nivel mental.
Consejos para afrontar senderos expuestos con tu MTB
Rueda a baja velocidad: ante un sendero expuesto no merece la pena arriesgar nada ni pensar en extraer diferencias, si estás en una carrera. Es un tramo de pura supervivencia donde te recomendamos olvidarte del crono. La seguridad se torna principal, ya que una caída en estos tramos tiene casi siempre consecuencias fatales. Por ello, anticípate lo máximo posible al inicio del sendero, aminora todo lo posible la velocidad, sin llegar a pararse, con la intención de coger la línea más segura y tener mejor capacidad de maniobra del manillar.
Mirada siempre al frente: aquí cabe aún más importancia si cabe la anticipación y estudio del sendero con la mirada. Mantenla fija 5-10 metros por delante y nunca caigas en la tentación de mirar hacia el precipicio, porque corres el riesgo de perder el punto de referencia y equilibrio.
Sigue la línea central del sendero: en tramos expuestos que atraviesan paredes o acantilados no hay que rodar cerca de la línea interior y se debe optar por una posición intermedia teniendo en cuenta la escasa anchura del sendero. De lo contrario, golpearás con el manillar en la pared, perderás el equilibrio y te irás por inercia al lado de la caída.
En cambio, en caminos sin pared interior podemos acercarnos un poco más al borde interior. Pero nunca dejando alejada la línea intermedia. El borde del sendero puede estar más sucio y tener piedras que puedes golpear y desequilibrarte.
Ábrete ligeramente para tomar las curvas: en los giros, al contrario que en pistas o senderos convencionales, la línea a seguir no deberá pasar por el vértice geométrico de la curva, sino que la trazada deberá desplazarse también hacia el centro. No obstante, te recomendamos abrirte ligeramente unos metros antes de la entrada de la curva, reducir notablemente la velocidad y comenzar girando poco a poco, siempre por la línea central e intentando cerrarse en la salida.
Mejora tu equilibrio (fuera del sendero): si tienes problemas para manejarte bien en este tipo de tramos, te recomendamos realizar ejercicios de equilibrio sobre la bici que luego te vendrán muy bien cuando entres en acción. Tanto en tramos expuestos de subida como bajada la postura y reparto de pesos en la bicicleta es fundamental. La flexión de rodillas y hombros, el golpe de pedal de 10º y otros trucos que te explicamos en este texto te vendrán muy bien para mantenerte erguido y firme sobre la bici:
Adapta tu bici (manillar, frenos y neumáticos): tres puntos clave sobre los que actuar si quieres mejor control de la bici en los senderos expuestos. Un manillar de gran anchura (740 mm o superior), te permitirá hacer mejor palanca y maniobrar mejor ante obstáculos o curvas. Pero cuidado con los senderos en cañones o acantilados porque pueden golpear la pared y desequilibrarte. En este caso es más seguro uno estrecho de 720 – 740 mm.
El buen estado de los frenos es esencial para cualquier ruta de alto componente técnico. Y en senderos estrechos y expuestos se usan más de lo normal para controlar la trazada a baja velocidad.
Y, por último, deberás adaptar tu presión a las condiciones del terreno, primando las presiones bajas para obtener un extra de agarre y no resbalarse con rocas, tierra suelta o curvas. No escatimes en grip para tus cubiertas en estas situaciones.
Para afrontar un tramo de estas características te recomendamos tener un nivel bueno o muy bueno de técnica, con un gran control de tu equilibrio sobre la bicicleta. De lo contrario, te recomendamos buscar alternativas más asequibles al sendero.
Controlar factores como el vértigo y la concentración son fundamentales para salir sin problemas de estos tramos. Centrándose únicamente en la trazada del sendero, con la mirada al frente y una postura relajada tendrás ya un buen porcentaje del camino hecho. Tu manejo del manillar, el freno y la propia inercia de la bicicleta harán el resto.
Como en el entrenamiento puramente físico, practicar con retos más sencillos es la base para, seguidamente, saltar de nivel y adentrarte en estos tramos con confianza. El entrenamiento y la constancia, además de altas dosis de precaución son fundamentales para tener una buena técnica con la bici.