Luz verde para seguir entrenando, pero con reservas, porque persisten los mareos. Poco podía esperar Sergio Mantecón que la caída en la Sea Otter le iba a marcar la temporada. Fue una de aquellas caídas que suelen considerarse tontas, pero de consecuencias fatales para el bravo corredor español. A raíz de la misma se sucedían los mareos y los problemas de visión, hasta el extremo que tuvo que ponerse en manos de los médicos, teniendo que renunciar a las pruebas de la Copa del Mundo que se han disputado hasta la fecha. Pero, por fortuna, el mal de ojo que alguine hizo a Mantecón parece ser que se está desvaneciendo y después de estar un mes parado ya le hemos visto montar en bici. "He estado un mes completo parado, haciendo carretera pero en mountain bike, porque es más relajada que el MTB. Lo que me marean son los baches", dice Sergio.
Con el paso del tiempo, Sergio ha recibido por parte de los médicos "luz verde para entrenar", pero yendo con cautela, ya que "cuando hay muchjos baches todavía me mareo". Después de ver cómo un accidente le cambiaba por completo los planes de la temporada, ahora el corredor del Trek-Factory Racing espera llegar con fuerzas a Andorra, a la Copa del Mundo, "pero está claro que no podré llegar en plenitud de condiciones físicas". Por esta razón ya piensa en el Mundial de septiembre, "donde espero estar a tope", sabiendo encajar el golpe de la Sea Otter, ya que en el mountain bike "siempre ocurren contratiempos".
Y es que aunque tiene la luz verde para poder volver a la momntaña, Sergio Mantecón tiene que adentrarse en el monte con precaución. "Puedo ir hasta que sufro los mareos. Todavía sigo con los tratamientos de osteopatía, y sigo también una dieta específica para este tipo de lesión y también hago unos ejercicios físicos en el gimnasio específicos".
Por su bien y por el bien del MTB nacional, esperamos que a partir de ahora la Diosa fortuna sea más generosa con Sergio Mantecón.