Specialized Carve Comp 29er 2012. En la línea de la excelencia

Estamos ante una 29er, pero no ante una excepción. Nada más subirte a ella descubres que todo parece estar en su lugar de la manera más correcta posible. La Carve Comp de la marca de la ‘S’ rasgada sigue fiel al estilo y filosofía del resto de la gama.

Specialized Carve Comp 29er 2012. En la línea de la excelencia

Estamos ante una 29er, pero no ante una excepción. Nada más subirte a ella descubres que todo parece estar en su lugar de la manera más correcta posible. La Carve Comp de la marca de la ‘S’ rasgada sigue fiel al estilo y filosofía del resto de la gama.

Fabricado en el aluminio M4 con especificaciones propias de Specialized, tiene la calidad que se espera de una gran marca. A diferencia de otros, no es demasiado llamativo en cuanto a formas, pero posee detalles muy buenos, como la pipa de dirección tapered o el diseño de los tirantes, que ha sido pensado para obtener el máximo de absorción posible sin perder rigidez a la hora de recibir impactos. Es por eso por lo que se ha eliminado el refuerzo que une ambos tirantes en la zona que toca el tubo de la tija de sillín. De esta manera, recortamos unos buenos gramos a la báscula, y además obtenemos un paso de rueda mayor para no tener problemas en caso de pedalear en las peores condiciones climáticas posibles, como barro o nieve -como nos pasó en una de las sesiones de fotos de acción-. Otro buen detalle es el anclaje de disco trasero, que es postmount directo, de manera que nos ahorramos el adaptador necesario para colocar el freno.

La Carve monta una RockShox XC32 TK de 80 mm de recorrido, una muy buena opción si tenemos en cuenta que la altura de pipa de dirección es de 120 mm y tenemos que compensar la altura de la parte delantera. En cuanto a las regulaciones, podremos regular la dureza del muelle, el rebote y el bloqueo. La transmisión y los cambios están integrados por Shimano Alivio (pedalier, mandos de cambio y desviador) y SLX (cambio). Las ruedas son una combinación de llantas Carve con frenos Formula, y los neumáticos son unos The Captain Control de 2.0”. En frenos nos encontramos con los Shimano M446 con discos de 180 mm delante y 160 mm detrás. El resto de los componentes son Specialized, y entre ellos destacan los puños, que son unos Body Geometry con unas “protuberancias” que ayudarán a apoyar mejor la mano, para tener más comodidad.

Como no podría ser de otra manera, encima de la Carve te encuentras a gusto desde el primer segundo, ya que todo está en su lugar y de la forma adecuada. Los componentes Specialized dan la talla y son un gran acierto. En marcha, enseguida nos damos cuenta de que lo que se ha buscado es hacer una bici que se sienta noble. En todo momento podremos intuir, y así será, cuál será la respuesta de la bici. Este carácter de la Carve hace que realmente no sea tan manejable como en un principio podríamos esperar habiendo probado otros modelos de la marca con rueda de 29 pulgadas, pero a decir verdad, la apuesta es clara: es el modelo sport de la marca, por lo que se busca sobre todo la comodidad. Con esto no queremos decir que no se mueva bien, sino que se apuesta por el confort, que en definitiva es lo que buscará el usuario de esta bicicleta.

La corta potencia y su ancho manillar nos otorgarán ese plus de agilidad que a alguien le podría llegar a faltar por geometría. En otro aspecto, la horquilla funciona correctamente y se muestra lo suficientemente absorbente a pesar de contar sólo con 80 mm de recorrido. Al fin y al cabo, el aporte extra de absorción de las ruedas ayuda a esta sensación.

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Cabe destacar que equipa casete de 9 coronas, y consideramos que por el precio que tiene ya podría montar 10 como la mayoría de sus rivales. De todas maneras, no será una excusa si no subes por una subida, ahí el tema serán tus piernas.

Los componentes nos gustaron mucho todos, como en la mayoría de los casos en los que probamos una Specialized, pero dieron que hablar los puños, sobre todo el día de test que contamos con la participación de cinco lectores. No podemos decir que vayan mal, pero sí tuvimos una respuesta unánime en la que el veredicto es que inicialmente resultan raros. Las cubiertas nos parecieron perfectas a pesar de ser unas teóricas 2.0”, tanto por su agarre como por su tracción.

La Carve es una bici noble, perfecta para iniciarse en nuestro deporte con unas garantías excelentes de funcionamiento. Además, estéticamente es de lo más atractiva.

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