El belga agranda su leyenda y logra la primera victoria en el año de su despedida sobre una bici equipada con frenos de disco.
Una imagen para el recuerdo. Por primera vez en la historia, una bici montada con frenos de disco hidráulicos logra la victoria en una carrera profesional de ciclismo en carretera. Specialized se anota este simbólico tanto, y lo hace gracias a una de sus estrellas con más renombre. La leyenda del ciclismo; Tom Boonen (Quick-Step Floors).
El belga del Quick Step apura al máximo los 75 días que le restan como profesional (hasta la París-Roubaix 2017) y engorda su extraordinario palmarés de triunfos. Gaviria, el alumno aventajado del maestro Tom, ha devuelto el favor al belga y le ha lanzado a la victoria en esta ocasión. Viviani, otra vez segundo, es el nuevo líder de la general gracias a las bonificaciones.
La carrera
Tom Boonen quiere salir del ciclismo por la puerta grande. En el año de su despedida, o mejor dicho en los últimos meses de carrera profesional, colgará la bicicleta el 9 de abril coincidiendo con la París-Roubaix, el belga se muestra dispuesto a dejar huella.
No es algo nuevo, es lo que ha hecho durante 16 años, desde que es profesional. Hoy, en la segunda etapa de la Vuelta a San Juan, Boonen ha vuelto a levantar los brazos. Un gesto que ha repetido en innumerables ocasiones, pero que últimamente, entre caídas y lesiones, no lo hacía con frecuencia. De hecho, no lo hacía desde el 3 de septiembre, desde que se anotó la victoria en la Clásica de Bruselas.
“Cada día es especial para mí”, ha señalado Boonen tras bajar del podio. “Cada día es la última vez. Por eso todo es especial, aunque lo intento vivir con serenidad y dando siempre el máximo. Así hasta el 9 de abril”, la fecha de su despedida.
En perfecta sintonía con su compañero Gaviria, Boonen ha logrado la victoria. En la primera etapa fue el belga quien lanzó al colombiano; hoy ha sido Gaviria quien ha lanzado al maestro, y este, pese al peligro que siempre supone tener a Viviani al lado, ha podido llevarse el triunfo.
Viviani, el flamante campeón olímpico de ómnium, no se ha ido de vacío, ya que, gracias a sus dos segundos puestos y las consiguientes bonificaciones, es el nuevo líder de la general. La Vuelta a San Juan estrena internacionalidad por todo lo alto, con las victorias de Gaviria y Boonen y el liderato de Viviani.
“Estoy un poco enfadado porque esperaba ganar”, reconocía Viviani por su parte. “Debí haber salido antes para intentar sorprender a Boonen, pero es muy difícil conseguirlo con el treno del Quick Step. Pero soy el líder e intentaré defender este maillot en la crono de mañana porque los entrenamientos que he hecho para el ómnium me vendrán bien”.